«Algunos» de los argentinos cuya documentación italiana es investigada «eran conscientes de las irregularidades que se cometían», dijo el abogado del consulado de Italia, Sergio Barzola, quien evitó comentar si entre esas personas hay jugadores de fútbol.
Numerosas pruebas han puesto en evidencia a falsificadores argentinos e italianos de pasaportes europeos con los que se habrían beneficiado futbolistas del país sudamericano, aseguró este domingo el juez a cargo de las investigaciones del asunto en Buenos Aires, Norberto Oyarbide.
El magistrado dispuso la detención de 40 personas en la capital argentina como resultado de más de 100 registros en oficinas, gestorías, imprentas, clubes y domicilios particulares efectuados en los últimos días en este país.
Los sospechosos del fraude «han dejado sus voces en una enorme cantidad de horas grabadas y en ellas han dado a conocer con inmensa tranquilidad su manera de operar», dijo Oyarbide, según la agencia estatal argentina de noticias Télam.
«Esto motivó que, cuando el proceso estuvo lo suficientemente maduro, dispusiera los allanamientos que tuvieron mucho éxito en el sentido de la obtención de piezas probatorias valiosas como papeles, sellos, agendas», indicó el magistrado.
El juez Oyarbide aseguró que en la causa a su cargo se investiga «un comportamiento delictivo trasnacional que no es solamente llevado a cabo en Argentina sino también en diversas ciudades de Italia».
«A raíz del conocimiento que obtuve en base a comunicaciones que mantuvieron los protagonistas argentinos del caso con los italianos, se han detectado alrededor de 700 trámites iniciados en Italia con datos totalmente falsos, con el propósito de obtener la ciudadanía italiana y luego el pertinente pasaporte», agregó el magistrado.
Además, comentó que «no sólo hay futbolistas sino también particulares» investigados en la causa y que más allá de los resultados obtenidos hasta ahora, aún se está «tratando de desentrañar las últimas comunicaciones entre los protagonistas».
El presunto fraude, que responde a una denuncia del consulado de Italia en Argentina, supuso un negocio de unos 30 millones de pesos (seis millones de euros) por la venta de documentos, según fuentes judiciales citadas por la prensa argentina.
Las fuentes indicaron que los detenidos (32 mujeres y ocho hombres) son abogados, contables y gestores acusados de formar parte de una red de falsificadores de documentos italianos creada en vista de que la Unión Europea (UE) declaró en 1995 la ilegalidad del «cupo de extranjeros» en clubes de países comunitarios.
Los delitos de «falsificación de documento público» y «asociación ilícita» que investiga el magistrado argentino son castigados con penas que van de uno a seis años de prisión en el primer caso y de tres a diez años en el otro.
«Algunos» de los argentinos cuya documentación italiana es investigada «eran conscientes de las irregularidades que se cometían», dijo el abogado del consulado de Italia, Sergio Barzola, quien evitó comentar si entre esas personas hay jugadores de fútbol.
Barzola admitió que «se falsificaron firmas y se hallaron sellos falsos, específicamente la firma» del cónsul general de Italia en Argentina, Giancarlo Curcio.
EFE
