Bolivia y Chile viven en los últimos tiempos una inédita fase de acercamiento desde que en 2006 tanto Bachelet como Morales llegaron al poder e iniciaron el proceso de acercamiento.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, desea que las relaciones entre Bolivia y Chile pasen a «una segunda fase», tras el acercamiento de los últimos tiempos, y anunció este lunes que ambos Gobiernos se reunirán en la investidura de Fernando Lugo como presidente de Paraguay.
«Mi deseo es ahora pasar a una segunda fase después de crear una confianza de pueblo a pueblo y de gobierno a gobierno», dijo el mandatario boliviano en una conferencia de prensa en La Paz ante medios internacionales.
Morales además señaló que, en una conversación telefónica que mantuvo el domingo con su homóloga chilena, Michelle Bachelet, acordaron aprovechar la toma de posesión de Fernando Lugo como presidente paraguayo para mantener reuniones a nivel ministerial.
«Cómo lanzarnos a una segunda fase está en debate», apuntó el mandatario boliviano.
Bolivia y Chile viven en los últimos tiempos una inédita fase de acercamiento desde que en 2006 tanto Bachelet como Morales llegaron al poder e iniciaron el proceso de acercamiento.
Los presidentes fijaron una agenda de diálogo con trece temas de importancia bilateral, de los cuales el sexto es el reclamo boliviano de una salida soberana al Océano Pacífico.
Bolivia perdió a manos de Chile 400 kilómetros de costa hace 129 años en la Guerra del Pacífico, en un conflicto la que además fue derrotado el ejército peruano.
Desde entonces, con la excepción de un breve periodo en los años 70 durante las dictaduras de Augusto Pinochet y Hugo Bánzer, ambos países no mantienen relaciones diplomáticas.
En mayo, en unas declaraciones conjuntas anteriores al inicio de la V Cumbre de América Latina, el Caribe y la Unión Europea, Bachelet y Morales coincidieron en que ambos países han alcanzado una relación de confianza que les permite pasar ahora a los hechos.
EFE
