«No es normal que en unos octavos de final nos manden a una cancha pequeña, donde se oye todo y se hace difícil jugar. Es raro», dijo el tenista nacional.
Fernando González, bronce olímpico en Atenas 2004 y cuartofinalista, por el momento, en Beijing 2008 tras arrollar al belga Olivier Rochus (6-0 y 6-3), lamentó que sus partidos sean desplazados a una pista secundaria, «a pesar de estar ya en octavos de final».
«No es normal que en unos octavos de final nos manden a una cancha pequeña, donde se oye todo y se hace difícil jugar. Es raro», dijo González, que jugó en una de las pistas con paso libre para los aficionados y con una capacidad para 200 espectadores.
«Lo he comentado con James Blake. No es normal que me manden a la pista 7. A excepción del primer partido, todos los he jugado en una pequeña. Me imagino que es porque aún hay muchos partidos en juego y mucho tenista chino», justificó el tenista de Santiago.
González se mostró feliz, no obstante, por el juego desplegado ante Rochus, al que ganó en menos de una hora.
«No es nada fácil ganar una medalla. Ninguno de los tenistas de arriba lo ha logrado nunca», apuntó González, que subrayó que «cuando juegas por Chile tienes una motivación mayor»
Ante Rochus, dijo, «me sentí mejor que ayer».
«Voy de menos a más», añadió el sudamericano, que no quiere ver más allá del siguiente partido ni ampliar sus perspectivas.
«He ganado tres partidos sólo mirando al próximo rival. No hay que mirar más allá porque se pierde la perspectiva», apuntó González, que se enfrentará a Paul Henri Mathieu en cuartos de final.
«Todos son difíciles. Mathieu es muy bueno y le respeto. Hemos jugado muchas veces e intentaré ganar. Será un partido complicado», dijo el chileno, que confió en mantener el nivel ofrecido ante el belga Rochus.
«Hacía tiempo que no jugaba tan bien. La pelota me subió como hacía tiempo. Espero seguir así», concluyó González.
EFE
