Otra jornada más, el boxeo cubano mantuvo su racha triunfal en el torneo de Beijing 2008 después que el peso pluma (57 kilos) Idel Torriente consiguiera una sufrida victoria a los puntos (10-9) frente al mogol Enkhzorig Zorigtbaatar y paso a los cuartos de final.
La victoria de Torriente fue la tercera del boxeo cubano, que llegó con 10 púgiles y sólo ha perdido a uno, con seis que ya están clasificados para los cuartos de final y otros tres que esperan conseguir el mismo objetivo.
Torriente, con una excelente técnica, se contagió del boxeo cuerpo a cuerpo que le impuso su rival y estuvo a punto de quedar eliminado de no ser que con menos de 12 segundos, en el cuarto asalto, conectó el golpe de izquierda que rompió el empate en la puntuación y se llevo la victoria.
«No fue una pelea fácil porque me tuve que enfrentar al público, al árbitro y a los jueces, pero conseguí la victoria gracias a la gran preparación física con la que he llegado al torneo», declaró Torriente, que en los cuartos de final tendrá de rival al azerbaiyano Shahin Imranov, ganador fácil a los puntos (18-9) del georgiano Nikoloz Izoria.
Torriente dijo que tenía «toda la fuerza del mundo» y su única meta era llevarse una medalla de Beijing, en lo que ha sido su debut olímpico.
«Aquí no sólo se tiene que venir a adquirir experiencia sino también a lograr resultados y eso es lo que he logrado esta noche, un gran triunfo», subrayó Torriente.
Por su parte, el entrenador de Cuba, Pedro Roque, dijo que hasta el momento, el boxeo de su país estaba en la línea de mantener la hegemonía de siempre y seguir deleitando a todos con un espectáculo deportivo único.
«Siempre he dicho que a unos Juegos Olímpicos no se viene para adquirir experiencia sino para lograr resultados y hasta el momento el equipo ha respondido de forma maravillosa», destacó Roque. «La preparación física y sicológica que hicimos con los muchachos ha demostrado ser muy buena».
Roque dijo que ahora se trabajaba en el aspecto sicológico de mentalizar a los peleares que pueden ganar a cualquier rival, sin importar las dificultades que se les presente.
«Eso fue lo que sucedió esta noche con Idel, que hizo méritos para haber ganado con más margen de puntos, pero de nuevo los jueces no hicieron bien su trabajo y siguen dejando dudas, en cuanto que el problema de sus decisiones no está solucionado», valoró Roque. «No soy partidario que me den nada que no merezco, pero tampoco que me lo quiten y eso fue lo que sucedió esta noche».
A pesar de lo justo de la decisión final de la pelea, Roque reiteró que estaba muy contento porque los jóvenes valores de la escuela cubana, que tanto gusta a todos dentro del mundo del boxeo aficionado, estaban demostrando calidad, responsabilidad y aportando buenos resultados.
«Todos hablaban antes del torneo de la crisis del boxeo de Cuba, de momento, la misma no ha aparecido, mientras que otros equipos como el de Rusia y Estados Unidos han sufrido importantes bajas», agregó Roque.
EFE
