El embajador chileno en Buenos Aires dijo que Andrea Urzúa, detenida tras ser sorprendida con materiales explosivos en una visita a los ex lautaristas recluidos en la cárcel de Neuquén, cometió dicho delito en territorio argentino, por lo que debe responder ante la justicia del vecino país.
El embajador de Chile en Argentina, Luis Maira, dijo este jueves que el Gobierno no intervendrá en el caso de Andrea Urzua Cid, la chilena que fue sorprendida portando materiales explosivos cuando, el sábado último, concurrió a la cárcel de Neuquén para visitar a dos ex lautaristas vinculados al asesinato en 2007 del cabo de Carabineros Luis Moyano.
El diplomático, informó la radio Bío Bío, abordó el tema al participar en el vigésimo séptimo encuentro del Comité de Integración Paso Cristo Redentor, Valparaíso-Mendoza.
En la ocasión manifestó que no correspondía al Ejecutivo tomar cartas en este asunto, considerando que el supuesto ilícito se cometió en territorio trasandino, por lo que son las autoridades judiciales del vecino país las que deben resolver respecto de la joven chilena, que arriesga una pena entre tres y ocho años de cárcel y la que iba a ser trasladada a una cárcel de alta seguridad de Buenos Aires.
Se estableció que Andrea Urzúa llevaba escondida una gran cantidad de nitrocelulosa, elemento utilizado para la confección de explosivos.
Por otra parte Maira dijo que el próximo lunes 29 de este mes se efectuará el juicio a los ex lautaristas Freddy Fuentevilla y Marcelo Villarroel por el delito de porte de armas en las afueras de una pub en San Martín de Los Andes, lugar donde se trenzaron a golpes con los guardias del local.
Maira dijo que de acuerdo a cómo evolucione ese proceso se tomarán medidas para que se concrete el decreto de expulsión de ambos, para que respondan ante la justicia chilena por su presunta participación en el asalto al Banco Security, en diciembre de 2007, hecho que terminó con el asesinato en el centro de la capital del cabo Moyano.
