De acuerdo a los antecedentes publicados hoy por el diario La Prensa Austral, la funcionaria usaba su cuenta corriente para cometer el supuesto delito. La entidad financiera ya presentó una querella criminal. Mientras, el Ministerio Público realiza las últimas diligencias para pedir al tribunal de garantía local que formalice la investigación.
La gobernadora de Tierra del Fuego, Catalina Besnier Anguita, se encuentra en el ojo del huracán. Ello porque el Banco Estado de Punta Arenas la responsabiliza de haber realizado un millonario fraude en la sede de Porvenir.
Según da cuenta La Prensa Austral, el caso se encuentra en manos de la fiscalía de Porvenir, aunque hasta ahora la autoridad no ha sido formalizada.
La presentación del Banco Estado apunta a la responsabilidad de una serie de personas, entre ellas la gobernadora, por el delito de fraude por más de $ 153 millones.
A fines de junio de 2009, una vez conocida la situación, el Banco Estado le cerró la cuenta corriente a Besnier. Debido a ello, en agosto de 2009, la mujer presentó un recurso de protección ante el tribunal de alzada de Punta Arenas, el cual fue rechazado.
Esto llevó a Catalina Besnier a presentar un recurso de protección en contra de la entidad financiera, que también fue rechazado por la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, el 18 de agosto del año pasado.
La Corte analizó los antecedentes y, según el matutino patagón, tuvo a la vista un informe de Banco Estado que apunta a la responsabilidad directa de Besnier en los hechos.
De acuerdo a la resolución de los tres magistrados, el fraude se habría efectuado de la siguiente forma:
“Una funcionaria del Banco recurría a clientes que facilitaban sus cuentas corrientes para depositar cheques del cónyuge de ésta (la funcionaria), los que carecían de fondos, autorizando con posterioridad ella misma la liberación de los fondos retenidos, los que luego se traspasaban a otras cuentas, desde las que finalmente se retiraban, siendo la de la recurrente (Catalina Besnier) precisamente de éstas últimas, registrando más de 60 transferencias de fondos por mesón y una cantidad similar de traspasos por Internet, para los cuales puso en conocimiento de la inculpada (la funcionaria bancaria) su clave secreta y de uso personal”.
En su oportunidad, el abogado Gonzalo Droguett, patrocinante de Besnier, dijo que la cuenta corriente que mantenía en la entidad financiera era usada para pagar los sueldos de la empresa maquiladora de productos marinos ligada a Besnier.
A su vez, la ahora gobernadora de Tierra del Fuego señaló que a través de tal cuenta corriente ella realizaba pagos de remuneraciones de los trabajadores que, como persona natural, empleaba en el procesamiento o maquila de productos marinos.
Besnier recurrió ante la Corte Suprema para tratar de revocar la resolución de la Corte de Punta Arenas, pero el máximo tribunal confirmó el dictamen.
El cuestionamiento a la gobernadora de Tierra del Fuego, se suma al caso de José Miguel Steigmeier, quien dejó el cargo de gobernador del Bio Bío el viernes pasado, a raíz de una publicación de El Mostrador que lo vinculó a la red que apoyó a Paul Schafer, creando una sociedad que usó los dineros de un fideicomiso en Canadá para comprar un terreno en Los Ángeles. Tras conocer los antecedentes, el Ministerio del Interior optó por destituirlo.
Este diario intentó obtener una opinión de parte de la secretaría de Estado sobre la situación de Besnier, pero hasta el cierre de esta nota no hubo respuesta.
