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Incautan cuatro rifles, cinco miras telescópicas y una pistola a jefe chileno de Ahlus Sunnah

Si bien es cierto las armas son de aire comprimido, uno de los rifles lanza perdigones cuyo tamaño supera a los proyectiles 9 milímetros, los que disparados en forma certera, podrían matar a una persona. Este armamento, según confidenció una fuente a El Mostrador, Orrego Orrego lo compró por Internet en Inglaterra y habría gastado más de US$ 10 mil en adquirirlos. El fiscal Francisco Jacir perdió la oportunidad de detenerlo e interrogarlo, ya que el 17 de mayo pasado abandonó Chile con destino a Londres.


La Fiscalía Oriente incautó hace algunas semanas cuatro rifles, cinco miras telescópicas, una pistola, un silenciador y 34 cajas de municiones desde la casa del jefe del grupo salafí  Ahlus Sunnah en Chile, Jorge Patricio Orrego Orrego. Este último, a tres días de la diligencia, viajó a Inglaterra el 17 de mayo pasado, sin que el Ministerio Público pudiera detenerlo.

Si bien es cierto las armas son de aire comprimido, uno de los rifles lanza perdigones cuyo tamaño supera a los proyectiles  9 milímetros, los que disparados en forma certera pueden matar a una persona. Este armamento, según confidenció una fuente a El Mostrador, Orrego Orego lo compró por internet en Inglaterra y habría gastado más de US$ 10 mil en adquirirlos.

De hecho, las armas tienen el peso y medidas de las verdaderas. Este hecho implica que sirven perfectamente para realizar instrucción paramilitar.

Esta es una de las pruebas que maneja el fiscal oriente, Francisco Jacir y que dará a conocer el próximo lunes o martes en la Corte de Apelaciones de Santiago, cuando los ministros revisen las medidas cautelares de libertad y arraigo que el Cuarto Tribunal de Garantía le otorgó la semana pasada a Mohamed Saif Ur Rehman Khan. Este último fue detenido el 10 de mayo en la embajada de Estados Unidos con rastros del explosivo Tetril. La existencia de este armamento y la ligazón de Ahlus Sunnah Chile con Khan podrían influir en el criterio del tribunal de alzada capitalino al fallar sobre la libertad concedida al joven pakistaní.

La importancia de la diligencia, tanto para la fiscalía como para la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), es el vínculo que existió entre Orrego Orrego y Khan. De acuerdo al informe que la ANI entregó el 14 de mayo a Jacir, dijo una fuente del Ministerio Público, Khan frecuentaba la mezquita As Salam de Ñuñoa, donde concurría todos los viernes a rezar.

“En ese lugar se relacionó en particular con los integrantes del grupo Ahlus Sunnah Chile, Pablo Andrés Balboa (“Pablo Rezuc”), Christian Soto Cerda (“Hassan Isa”) y Alex Mauricio Muñoz Aravena (“Bilal”), sostiene el documento obtenido por este medio. De hecho hay un video de la reunión.

[cita] El fiscal Jacir maneja una serie de fotografías donde Khan aparece con un rifle junto a otras personas en Pakistán.[/cita]

A renglón seguido, indica que “al observar estos encuentros y su carácter religioso radical… los dirigentes del Centro Islámico deciden reunirse informalmente con Saif Ur Rehman. Al ser consultado por su vinculación con el grupo Ahlus Sunnah Chile, indicó que tenía ciertas coincidencias ideológicas y religiosas sobre su versión del Islam y también una relación de amistad”.

“La ligazón de Saif Rehman Khan a ese grupo se manifiesta en que éste, a lo menos en cinco oportunidades, fue observado en la mezquita As Salam con tres miembros del grupo Salafista Ahlus Sunnah Chile, señalados anteriormente”, continúa.

Cabe recordar, en todo caso,  que el jefe de la mezquita As Salam, Said Rumié, se desvinculó públicamente de Ahlus Sunnah Chile. “Esperamos que la investigación dé un resultado y que este señor no esté vinculado con nada. Si lo está, que la ley se haga cargo de su responsabilidad”, dijo en su oportunidad Said Rumie.

Otro de los hechos sospechosos para los investigadores es que Orrego Orrego no tiene sueldo y, de acuerdo a las fuentes consultadas, siempre ha dicho que “vende artículos por internet”.

Khan bien podría saber manejo de armas, lo que sumado a la incautación de los rifles, la pistola y las miras telescópicas, configuran un cuadro para la fiscalía, la ANI y la policía.

Khan bien podría saber manejo de armas, lo que sumado a la incautación de los rifles, la pistola y las miras telescópicas, configuran un cuadro para la fiscalía, la ANI y la policía.

El error de Jacir

La pregunta que ronda ahora entre los investigadores, la policía, como también en la ANI, es para qué tenía Orrego Orrego dicho armamento escondido en su casa. Lo anterior, luego que Ahlus Sunnah Chile, a través de una declaración pública, sostuviera que se trata de un movimiento religioso pacífico que rechaza la violencia.

Pese a que las policías continúan indagando a los miembros de Ahlus Sunnah Chile, lo cierto es que el fiscal Jacir perdió la oportunidad de interrogar a Orrego Orrego, quien viajó a Londres, donde la comunidad Salafí es fuerte. Lo anterior sucedió, dijeron fuentes que conocen el caso, porque las armas de aire comprimido no están prohibidas por la Ley de Armas. Sin embargo, llama la atención que en distintas investigaciones que han llevado otras fiscalías, se le hayan imputado tenencia de los mismos elementos.

Un caso ejemplar lo constituye la indagatoria que llevó el fiscal Alejandro Ivelic en contra de Elliot Quijada, un conocido neonazi de la Quinta Región a quien se le incautaron armas del mismo tipo -aunque de menor poder- y literatura racista. Lo anterior, en el marco de las amenazas en contra de la senadora Lily Pérez durante la última campaña parlamentaria.

Tanto Jacir como el fiscal regional, Xavier Armendáriz, han recibido críticas del gobierno por la inefectividad no sólo en el caso de Pakistaní, sino también por no desarticular a los grupos anarquistas que están detrás de los atentados bomba perpetrados en Santiago y regiones desde 2005 a la fecha. A su vez, el fiscal nacional, Sabas Chahuán ha sostenido públicamente que se deben apurar las diligencias y mostrar resultados concretos.

Química, ferretería y joyería

 

Pero los cruces son aún más complejos, porque uno de los miembros de  Ahlus Sunnah Chile, Andrés Balboa (“Pablo Rezuc”), es un técnico químico. En tanto, otro de las personas con las que Khan se relacionó en Chile fue Mohamed Hassan Erian, conocido como “el egipcio”, quien trabajó en una ferretería y ahora lo hace en una joyería.

Para los investigadores la ligazón entre los explosivos de Khan con Balboa y “el egipcio” es una presunción suficiente para que vuelva a la cárcel y se pueda profundizar la indagatoria, porque los materiales están a la mano para fabricarlos. En todo caso, la Corte tiene ahora la palabra.

Si bien es cierto la corriente Salafista chilena se manifiesta contraria a la violencia y el terrorismo, en España los informes de inteligencia sostienen lo contrario.

Respecto a la llamada que hizo Khan a un número de teléfono que tendría vinculación con los lautaristas que mataron al cabo Moyano en octubre de 2007, el hecho complica aún más al joven pakistaní. Lo anterior, debido a que Khan se comunicó a ese teléfono que a su vez aparece con llamados hechos a Andrea Urzúa Cid, quien fue detenida en 2008 en argentina tratando de ingresar explosivos a la cárcel donde estaban detenidos  Freddy Fuentevilla y Marcelo Villarroel, quienes fueron enviados a Chile y se encuentran detenidos en la CAS. No era la primera vez. Urzúa Cid también fue detenida en 2003 portando nitrato de antimonio.

Las fotografías

Armas 2

El fiscal Jacir maneja una serie de fotografías donde Khan aparece con un rifle junto a otras personas en Pakistán. El defensor regional, Gabriel Carrión, quien patrocina al joven, aseguró que la imagen que circula en los diarios no es la de Khan, sino la de su hermano, cuando fueron a cazar en una localidad cercana a Islamabad, la capital de su país de origen.

Armas 3

Sin embargo, las imágenes que publica en exclusiva este medio, revelan lo contrario. De allí que Khan bien podría saber manejo de armas, lo que sumado a la incautación de los rifles, la pistola y las miras telescópicas, configuran un cuadro para la fiscalía, la ANI y la policía.

Las dudas se alimentan por la versión entregada por Khan, según la cual tres sujetos que hablaban inglés lo contactaron en la mezquita As Salam, a sólo días de que fuera llamado por la embajada de Estados Unidos, donde se le halló el explosivo que ya no se fabrica de manera industrial.

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