En la cita, los parlamentarios plantearon tanto los aspectos positivos de la incorporación, como también las aprehensiones que existen respecto al funcionamiento eficiente de la entidad.
El secretario general de Unasur, Néstor Kirchner, que este miércoles se reunió con senadores para conseguir el apoyo que permita que Chile ratifique su incorporación al organismo multilateral, dijo que en la jornada han «tenido muchas más coincidencias que divergencias».
Kirchner, que llegó este martes al país, donde ya sostuvo un encuentro con el Presidente Sebastián Piñera y con los ex mandatarios Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, sostuvo «que hemos tenido muchas más coincidencias que divergencias».
En la cita con Kirchner, los parlamentarios plantearon tanto los aspectos positivos de la incorporación, como también las aprehensiones que existen respecto al funcionamiento eficiente de la entidad.
El ex presidente argentino y actual diputado se reunió con el presidente del Senado, Jorge Pizarro; la Comisión de Relaciones Exteriores de la cámara alta y el presidente de la Unión Demócrata Independiente, principal partido de la derecha gobernante, senador Juan Antonio Coloma.
Al cabo de la serie de encuentros, Kirchner dijo que «soy optimista en cuanto al avance, tratamiento y los aportes que se han hecho para que mejore el proceso de integración que nos proponemos llevar adelante los latinoamericanos a través de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur)».
Respecto al estatuto del organismo que señala que su secretario general debe tener dedicación exclusiva para el cargo, cosa que hoy no se está cumpliendo, el ex mandatario sostuvo que debe considerarse que el referido estatuto «aun no está en marcha».
«A mí me han pedido los presidentes que colabore en la tarea de transición y fundacional que hay que llevar adelante; evidentemente después que quede confirmado o no ese artículo veremos que hacemos», argumentó Kirchner que asumió el cargo el pasado mes de mayo.
«Los propios presidentes me han pedido que más allá de mi tarea política y partidista que tengo en mi país, sea un ex presidente que participe en el proceso fundacional de Unasur», precisó.
Respecto a la cláusula democrática conversada este martes con el Presidente, Sebastián Piñera, Kirchner reiteró su total acuerdo para llevarla adelante.
El acápite apunta a garantizar el estado democrático y la libertad de expresión en sus países miembros. Un planteamiento similar al que existe en el Mercosur y la OEA.
Kirchner dijo, en todo caso, que «en ningún momento el presidente Piñera lo puso como condición, pero lo que abunda no daña y estoy seguro de que todos los presidentes están absolutamente de acuerdo de que exista esa cláusula democrática».
«Una cosa es una cláusula democrática y otra es influir en el funcionamiento interno de cada país. Y como lo que abunda, no daña. Me parece bárbara la libertad de expresión. Nosotros estamos en la Argentina dando una dura batalla por una nueva ley de medios, moderna, plural y diversa», agregó.
Por su parte, el presidente del Senado, Jorge Pizarro, valoró las reuniones indicando que a los parlamentarios les interesa que el proceso de integración vaya «mucho más allá de acuerdos de tipo económico o comercial».
«Que sea una integración política y cultural y que los temas tengan que ver con la vida de las personas; hablamos de los temas de respeto a los derechos humanos, fortalecimiento de la democracia o políticas energéticas», añadió.
Pizarro explicó que le plantearon también a Kirchner las limitaciones que se avisoran, puesto que «necesitamos que sea un organismo fuerte en la solución de los problemas y que no se transforme solo en un foro más de presidentes o ejecutivos sin capacidad resolutiva».
«La Unasur está en un proceso de transición fundacional y nosotros vamos a hacer aportes por escrito sobre las dudas que nos asisten», añadió.
Explicó que entre ellos está desde la propia capacidad de gestión y permanencia, de la secretaría general, con una futura sede en Quito que hoy representa el diputado Kirchner «hasta la necesidad de tener políticas comunes consensuadas entre los distintos países en materia energética, cultural, política o económica», concluyó.
