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Piñera advierte que se aplicará el mismo criterio para civiles y militares si han cometido un delito de la misma gravedad

A 120 días de haber asumido sus funciones en La Moneda, el mandatario enfrenta varios problemas tanto dentro de la Alianza como en la oposición tras el proyecto de perdón a reos que impulsa la Iglesia Católica. Este malestar proviene desde la visión concertacionista de que lo que se busca es beneficiar a ex uniformados que están condenados por violaciones a los derechos humanos. Además, otro punto es la decisión del subsecretario de Deportes respecto a seguir en su cargo y no deshacerse de sus acciones de Colo Colo, situación que nuevamente pone en tela de juicio el tan conocido conflicto de interés.


Antes de conocerse la propuesta de la Iglesia Católica en torno al indulto bicentenario, el Presidente Sebastián Piñera ya enfrenta un sinnúmero de críticas que provienen tanto desde el interior de la Alianza que lo llevó al poder como de la oposición, debido a que los primeros ven con malos ojos que se perdone a condenados y vaya en desmedro de la promesa de campaña de tener mano dura contra la delincuencia. En tanto, los segundos observan que este proyecto podría incluir entre los beneficiados a ex militares procesados por violaciones a los derechos humanos.

En entrevista a El Mercurio, Piñera sostiene que aún no ha recibido la propuesta de la Iglesia y que cuando la tenga en sus manos la estudiará con “dedicación, interés y buena voluntad”.

“Voy a hacer una reflexión breve, de días, no de semanas, y decidiré lo que a mi mejor saber y entender es lo mejor para Chile”, precisa.

[cita]“Si un civil y un militar han cometido un delito de la misma gravedad, cuando aplicamos razones humanitarias debemos tener el mismo criterio” [/cita].

Sin embargo, aclara que su decisión no afectará ni debilitará la lucha frontal que su gobierno ha iniciado contra la delincuencia y el narcotráfico, ni colocar en peligro la seguridad ciudadana ni el orden público.

Respecto a los criterios que utilizará para llevar a cabo el indulto, Piñera explica que se considerará la gravedad del delito cometido, el grado de cumplimiento de la condena, el comportamiento penitenciario y el peligro que pueda representar para la sociedad.

“Cuando entramos a razones humanitarias, que tienen que ver con la compasión, por supuesto que uno debe considerar razones como la edad, el estado de salud o enfermedad, la situación familiar, especialmente la de madres con hijos menores de edad; pero yo no creo que en nombre de las razones humanitarias se deba discriminar ni por sexo ni por condición socioeconómica ni por origen étnico ni por preferencia sexual, ni tampoco por el hecho de ser civil o militar”, señala.

Respecto a esta posición, el jefe de Estado afirma que es la gravedad del delito lo más importante para tomar una decisión sobre el indulto, más que el hecho de que sea civil o militar.

“Si un civil y un militar han cometido un delito de la misma gravedad, cuando aplicamos razones humanitarias debemos tener el mismo criterio”, enfatiza.

Asimismo, dice estar conciente que este tema provoca grandes controversias, por lo que “tengo plena conciencia de que aquí chocan valores. Y que el Presidente va a tener que sopesar el valor de cada uno de esos valores y buscar la mejor forma de compatibilizarlos. Por una parte, por supuesto que yo estoy comprometido con los valores de la verdad y la justicia, pero también me interesa el valor de la reconciliación. Por supuesto que yo tengo comprensión y acogimiento para razones de carácter humanitario, pero también tengo que velar por no debilitar la lucha frontal contra la delincuencia, ni debilitar la seguridad ciudadana ni el orden público. Y, por tanto, es una situación compleja que va a requerir una reflexión muy profunda del Presidente, porque en materia de indulto, el único que tiene iniciativa es el Presidente de la República. Y esa responsabilidad yo la voy a asumir en plenitud”.

En tanto, en otra entrevista publicada en el diario español ABC, el jefe de Estado menciona ser partidario de avanzar en la búsqueda de la justicia, pero explica que “eso es tarea de los tribunales”, por lo que cuando un gobierno se dedica a juzgar el pasado “el único que pierde es el futuro”.

«Un país no puede quedar atrapado en su pasado y seguir reviviendo las mismas divisiones, odios y rencores que causaron tanto daño. Es malo cuando el pasado se transforma en un obstáculo para el futuro», argumenta.

«El Gobierno militar es parte de la historia (de Chile), y mi gobierno no va a ser un guardián de la historia sino un constructor del futuro», señala Piñera, para quien «a veces es bueno dejar que la historia duerma en paz», acota.

Chilevisión, Colo Colo y Ruiz-Tagle

Otro tema que ha movido las aguas de la política en el último tiempo es la decisión adoptada por el subsecretario de Deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, de permanecer en el cargo designado por el Ejecutivo y no deshacerse de las acciones que posee de Colo Colo.

La semana pasada la Contraloría dio a conocer un dictamen en el que impugnó su función en el gobierno con su propiedad de parte del club albo, dejándole la opción de vender sus títulos o continuar en sus funciones, pero absteniéndose de tomar decisiones concernientes a la actividad futbolística.

En tal sentido, Piñera alaba la función que está haciendo el ex presidente del cacique a cargo del Instituto Nacional del Deporte, añadiendo que para él fue una decisión difícil de tomar, “porque abandonó el mundo tranquilo y cómodo de sus empresas, de su familia y de Colo Colo para asumir esta responsabilidad”.

[cita]. “hemos detectado que muchos programas sociales son tremendamente ineficientes, llenos de despilfarros, y en algunos casos con rastros de corrupción”. [/cita].

En todo caso, aclara que la resolución de la Contraloría establece que no existe ninguna incompatibilidad entre ser director del IND y tener acciones de Colo Colo, “lo que sí determinó que tenía que abstenerse en todas aquellas decisiones que tuvieran que ver con el fútbol profesional. Afortunadamente, el principal rol del IND es con el deporte amateur y no el deporte profesional, ni mucho menos con el fútbol profesional”.

Por tanto, explica que a Ruiz-Tagle lo mantendrá en el cargo de subsecretario, pero hace una salvedad que es de acatar y cumplir en la letra y en el espíritu la resolución de la Contarloría “y por lo tanto abstenerse de cualquier decisión que tenga que ver con el fútbol profesional”.

En la misma línea, Piñera sostiene que el dictamen del órgano contralor dejó en claro que no existe incompatibilidad en su actuación como Presidente, por lo que determinó cumplir con el mandato constitucional de designar al presidente de TVN, Leonidas Montes, y proponer al Senado un miembro del directorio, Sergio Urrejola.

Sobre las críticas que ha recibido por no vender aún su participación en Chilevisión, el mandatario precisa que la decisión de deshacerse del canal la tiene tomada desde hace mucho tiempo, lamentando que la operación en tal sentido se haya frustrado.

Sin embargo, sostiene que “ceo en esto mucha doble intención, e incluso hipocresía, porque a veces los que más exigen la venta de CHV son los mismos que hacen lo imposible para dificultar o evitar esa venta”.

La encuesta Casen y una reingeniería social

El mandatario también da a conocer su visión sobre el resultado dado a conocer la semana pasada de la encuesta Casen, en la que se demostró un aumento de la pobreza y dio origen a un sinnúmero de dimes y diretes entre el oficialismo y la oposición.

Al respecto, Piñera precisa que algunas causas que explican este aumento son el ciclo económico y el aumento de precios de los alimentos, pero también la poca capacidad de creación de empleo, el estancamiento en la calidad de la educación y el debilitamiento de la familia.

Sin embargo, cuando dio a conocer las cifras mencionó otro factor y es la mala focalización y la ineficiencia del gasto social, por lo que explica que “hemos detectado que muchos programas sociales son tremendamente ineficientes, llenos de despilfarros, y en algunos casos con rastros de corrupción”.

“Vamos a hacer una profunda reingeniería que ya está muy avanzada de los 300 programas sociales para fortalecer los que están funcionando bien y modificar los que no dan resultado. Vamos a modificar la Ficha de Protección Social para que deje de castigar a las familias pobres que se esfuerzan, y para que dejen de excluir a familias de clase media que también necesitan ayuda. Y finalmente, aplicando la sabiduría de las madres, que cuando tienen un hijo enfermo le toman la temperatura varias veces al día, vamos a aumentar la frecuencia de la encuesta Casen, para estar con información al día de lo que está pasando y enmendar el rumbo a tiempo”, sostuvo.

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