El empresario dijo que dar refugio a un “terrorista” que fue miembro de la cúpula del FPMR es un “gravísimo error”, ya que se desacredita el estado de derecho del país. Además, culpa al guerrillero del crimen de su progenitor debido a que era parte de la máxima dirigencia del grupo subversivo.
El hijo de una víctima del terrorismo en Chile entregará el próximo martes una carta a la presidenta argentina, Cristina Fernández, para reclamar la extradición del ex miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), Galvarino Apablaza Guerra, a quien Argentina acaba de conceder refugio político.
En declaraciones que publica este domingo el diario argentino Perfil, Eliecer Yévenes, hijo de Simón Yévenes, dirigente del derechista Partido Unión Demócrata Independiente (UDI) asesinado 1987, aseguró que «no ha sido seria» la actitud de Fernández de conceder asilo a Apablaza.
El empresario, de 36 años, dijo que tiene previsto viajar este lunes a Buenos Aires para reunirse con representantes de la Asociación de Víctimas del Terrorismo en Argentina y el martes entregar una carta a la presidenta de este país.
Yévenes consideró que Apablaza no sólo ha sido el autor intelectual del asesinato del senador derechista Jaime Guzmán y del secuestro de Cristián Edwards, ambos hechos ocurridos en 1991 y por los que ha sido reclamado desde Chile, sino también del crimen de su padre.
«Creo que dar refugio a un terrorista que fue de la cúpula del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) es un gravísimo error. Se desacredita el Estado de derecho de nuestro país», aseguró.
El empresario culpó a Apablaza del asesinato de su padre «porque estaba en la cúpula del FPMR» y dijo que Chile extraditaría a «un criminal» a Argentina si este país se lo pidiera.
«La actitud de Fernández no es seria. Así lo consideran muchos dirigentes de derechos humanos», apuntó.
El Gobierno de Chile ha manifestado su malestar por la decisión de Argentina de conceder asilo político a Apablaza, quien vive en las afueras de Buenos Aires junto a su pareja, la periodista Paula Chaín, quien trabaja en la sede del Ejecutivo argentino desde 2005.
El presidente chileno, Sebastián Piñera, ha señalado que la concesión del asilo político al ex líder guerrillero es un «golpe a la causa de los derechos humanos en Chile» que «no contribuye en nada» a las relaciones bilaterales.
Además, Piñera envió una nota de protesta al Gobierno argentino y reprogramó una serie de actividades bilaterales.
Diputados de la oposición en Argentina rechazaron la decisión del Ejecutivo y adelantaron que citarán a los miembros de la Comisión Nacional de Refugiados (Conare) para que argumenten su resolución.
