El fallecimiento de Sebastián Pinuer Barría de 22 años y Julio Ulloa Vargas de 19 es para la institución policial un verdadero problema si es que se comprueba la presencia de esta enfermedad. Aunque es una de las versiones que se barajan, el tema es preocupante para los uniformados ya que las familias podrían retirar a sus hijos del curso o se podría cambiar el lugar donde se realiza el adiestramiento.
El Laboratorio de Criminalística de Carabineros investiga la presencia del virus Hanta en el predio de instrucción de Curacaví, donde ayer fallecieron los aspirantes a oficiales Sebastián Pinuer Barría de 22 años y Julio Ulloa Vargas de 19.
Fuentes policiales consultadas por El Mostrador explicaron que los jóvenes que se encuentran internados en el hospital institucional, se encuentran bajo observación para determinar o descartar que pudieran estar infectados y aplicarles un tratamiento médico si lo amerita.
Hay que recordar que el Hanta es una enfermedad provocada por ratones y de alta mortalidad, que hasta ahora se había visto en zonas muy acotadas de la Región Metropolitana.
El tema es preocupante para Carabineros ya que las familias podrían retirar a sus hijos del curso o la institución podría cambiar el lugar donde se realiza el adiestramiento.
Ayer el general Héctor Saldaña Tobar, director de sanidad del centro hospitalario, informó que 517 personas, entre aspirantes y oficiales concurrieron al centro asistencia para ser monitoreados con una ronda de exámenes.
En todo caso también se maneja una segunda teoría que implicaría el sobre uso de agentes químicos para instruir a los estudiantes, aunque en Carabineros tiene menos fuerza esta tesis porque eran jóvenes que llevaban pocos días de instrucción.
