El entrenador leyó las declaraciones del nuevo presidente de la Asociación Nacional de Fútbol, Sergio Jadue, por la prensa y le cayeron como un balde de agua fría. “Lo tomó pésimo”, asegura uno de sus amigos que insiste en que su gran freno es la desconfianza que tiene en relación a la nueva dirigencia. Según sus cercanos, Bielsa va a tomar unas vacaciones para decidir cómo enfrentará su futuro.
“Le han tirado el país encima”, asegura uno de los hombres cercanos a Marcelo Bielsa. Es la frase que resume el sentimiento del entrenador desde que Harold Mayne-Nicholls dejó la presidencia de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) en medio de unas polémicas elecciones.
En el círculo cercano al entrenador cuentan que Bielsa quiere quedarse al frente de la Selección Nacional, pero que el mismo hecho de que se haya articulado una imagen negativa frente a los chilenos, lo hace desconfiar aún más de la nueva dirigencia de la ANFP. Esta es su gran piedra de tope: “No confía en ellos y la confianza es un bien muy valorado por él. Es su único problema, porque él quiere quedarse. Ha hecho un trabajo fuerte con los muchachos y quiere seguir haciéndolo”, cuenta el hombre que, además, confirma que la petición del rosarino de generar un vínculo con Mayne-Nicholls proviene de esta misma desconfianza. “Es cierto que él lo quería como interlocutor, pero no porque sí, sino porque no hay cercanía con las nuevas autoridades del fútbol”.
Esta misma desconfianza creció aún más la noche del miércoles cuando Bielsa se enteró por la prensa de las declaraciones del nuevo presidente de la ANFP, Sergio Jadue, quien señaló que el silencio del entrenador de la roja significaba que permanecería frente a la Selección Nacional.
“Lo tomó pésimo, no le gustó para nada la actitud de Jadue; definitivamente los dirigentes no le dan confianza para trabajar”, dice otros de sus cercanos, quien también señala que Bielsa tiene “contrato vigente” y que desde ahora se va a tomar un tiempo para ver cómo se coordina entre el cuerpo técnico y la nueva dirigencia”.
Quien también se refirió al tema es el comentarista deportivo Ernesto Díaz Correa de Radio Cooperativa, quien contó en esa emisora el deseo del técnico de quedarse en el país. “Tenía pasajes para irse a Rosario, pero perdió el avión ya que tenía la reunión con los dirigentes, pero creo que él va a hacer respetar su contrato ya que él lo único que quiere es seguir dirigiendo al fútbol chileno. El no quiere irse del país y está feliz, ya que está contento de estar a cargo de la selección», dijo Díaz.
