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Bancada DC advierte «escasa credibilidad, promesas incumplidas e improvisación en primer año de Gobierno»

Aseguran que sólo se ha cumplido un tercio de lo prometido el pasado 21 de mayo.


La bancada de diputados DC evaluó con una nota «regular» el primer año del Gobierno de Sebastián Piñera. En esa línea, aseguraron que “la escasa credibilidad, la improvisación y las promesas incumplidas” han sido la tónica» de la actual administración. «Se han visto absolutamente reflejados en las últimas encuestas con un aumento en el rechazo a la gestión gubernamental cada vez mayor», agregaron.

Así lo señalaron hoy el jefe de la bancada de diputados DC, Patricio Vallespín y el subjefe, Gabriel Silber, quienes agregaron que, además, “ha existido una preocupante falta de empatía con las demandas ciudadanas, especialmente con los habitantes de regiones, siendo la ineficiencia en la reconstrucción la mejor prueba de aquello”.

Según precisaron, de un total de 182 compromisos anunciados el pasado 21 de mayo, “sólo se han cumplido 38, lo que equivale a un 20, 8 %”.

Vallespín agregó al respecto que “observamos un categórico incumplimiento de promesas, prueba de ello es por ejemplo, el anunciado proyecto para disminuir el 7 % a los pensionados; la existencia además de una constante letra chica, de inconsistencias entre lo que se dice y lo que se hace, y para demostrarlo, tenemos lo que ha ocurrido con las Bodas de Oro y con el post natal, entre otros casos”.

Sobre este punto, aclaró que “en la mayoría de los casos, el Gobierno ofrece algo y luego ingresa iniciativas distintas, con menor cobertura para los beneficiados, más exigencias y menor capacidad reguladora del Estado”.

Agregó, además, “la improvisación y poca claridad, es cosa de ver lo que ha ocurrido con la reconstrucción, lo que está ocurriendo con los combustibles y todo lo que pasó en Magallanes;  la descoordinación entre los ministerios; la falta de empatía con las regiones, tratando de imponer desde Santiago decisiones centralistas; la falta de respeto a la institucionalidad vigente, caso emblemático fue lo ocurrido con Punta de Choros;  la escasa capacidad de diálogo, prueba de ello fue todo lo vivido en relación a la discusión del primer reajuste; la ventas de acciones del Presidente, en fin, lamentablemente, la lista es larga”.

Finalmente, Vallespín señaló que “seguiremos en la tarea de fiscalizar porque obviamente nos interesa que la tarea se haga bien y como corresponde; como también seguiremos aportando nuestros votos cuando se trata de iniciativas que realmente contribuyen al bien común, algo que seguiremos haciendo; como, también, aportar para tener un Chile distinto, sintonizado con las demandas ciudadanas”.

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