Según el parlamentario, lo que se “reprocha” a la intendenta del Bíobio es el hecho de que mintió en una reunión con los pobladores de la Aurora de Chile en Concepción. “A mi juicio ella debió haber renunciado porque se afectó la fe pública pero todo esto no constituye una acusación constitucional”, hizo hincapié. Al respecto, el timonel de la colectividad, Carlos Larraín, señaló: “No tenemos ganas de destruir a la intendenta”.
El diputado RN Nicolás Monckeberg aseguró este viernes que el Presidente Sebastián Piñera debió haber aceptado la renuncia de la intendenta del Bíobio, Jacqueline Van Rysselberghe tras el episodio con los pobladores de la Aurora de Chile en Concepción.
En ese sentido, el parlamentario dijo en Radio Agricultura que “el episodio por todos conocidos en esa reunión en que la intendenta se expresó mal, fue una pésima declaración”.
Según Monckeberg, el escenario de hoy es distinto. “La acusación no es para emitir un juicio de mérito político amplio, hay causales. Es perfectamente posible que pudo haber habido un juicio de reproche de cómo actuó la intendenta, pero si no se configuran las causales, éticamente, moralmente uno no puede aprobarlas. Estas causales son mucho más estrictas de cómo las está aplicando la Concertación”, apuntó.
Agregando que “lo que se le reprocha a la intendenta es haber mentido en una reunión con pobladores, hay que ver si esa mentira tuvo o no efectos jurídico. No se llegó a materializar un solo proyecto al respecto o un solo papel (…) si esa mentira en derecho se quedó en el discurso donde se exageró la realidad, da mérito para la acusación, pienso que no es así. La magnitud del hecho tiene que ser grande para acusarla”.
Para el legislador “en este caso hay mucho más móviles políticos y electorales que realmente causales de acusación establecidas por la Constitución. A mi juicio ella debió haber renunciado porque se afectó la fe pública pero todo esto no constituye una acusación constitucional”.
Por su parte, el presidente de Renovación Nacional, Carlos Larraín, calificó como “sensata” la manera en que su partido está enfrentando el tema de la acusación constitucional presentada ayer por la oposición en contra de la intendenta de la Región del Biobío, Jaqueline Van Rysselberghe.
En entrevista con Radio Cooperativa, el senador dijo que “a nosotros no nos interesa ni andamos buscando la destitución de nadie, eso es algo que le corresponde al Gobierno, nosotros tenemos que mantener la actitud racional y lógica de estudiar esta acusación».
«Que tengamos ganas de destruir a la intendenta no es el caso, no estamos en esa parada, pero también nos duele que los acusadores de la intendenta vengan de sectores que tantas veces abusaron de los gobiernos regionales. Estamos con el alma dividida», remarcó Larraín.
Según el timonel de RN «la región está muy dolida y necesita un gobierno regional excepcionalmente bueno, pero en esto ha habido un propósito de la intendenta de convertir la máquina de Gobierno Regional en una máquina de apoyo para sus posibilidades electorales futuras».
«Eso no esta bien, pero que dé para destituirla, no sé», insistió.
