El técnico cruzado se molestó en cierto modo con algunas consultas referidas a poner un solo delantero o a no autorizar el ingreso del goleador Roberto Gutiérrez hasta sólo unos minutos antes del final del juego.
El entrenador de Universidad Católica, Juan Antonio Pizzi, aseguró que «habría sido peor perder que empatar» ante Vélez Sarsfield, tras la igualdad sin goles pese a tener un hombre más en la última media hora, que le impidió al campeón chileno sentenciar su clasificación a octavos de final de Copa Libertadores.
El técnico cruzado se molestó en cierto modo con algunas consultas referidas a poner un solo delantero o a no autorizar el ingreso del goleador Roberto Gutiérrez hasta sólo unos minutos antes del final del juego, al explicar que según lo observado en las prácticas y por el temor al subcampeón argentino, le llevó en definitiva a plantear un esquema más conservador de un solo hombre en punta.
«¿Si después perdemos? Podemos estar discutiendo o conversando dos siglos y no ponernos de acuerdo… soy el técnico y veo cosas en entrenamientos que en definitiva me autorizan a tomar cierto tipo de decisiones, es simplemente por eso. Tanto Roberto como (Pablo) Calandria buscaron generar más peligro, conozco muy bien a Vélez, sé que cualquier ventaja que le das te hacen un gol, hubiese sido peor perder que empatar», aseguró en rueda de prensa.
Pizzi, de hecho, recordó que sus dos primeros cambios fueron de índole ofensivo, al incluir a José Luis Villanueva por Felipe Gutiérrez y al héroe del triunfo 4-3 en Liniers, Francisco Pizarro, por Francisco Silva. «Si evalúan, los dos cambios fueron ofensivos, entra un delantero sale un mediocampista, entró un volante ofensivo y salió el ‘Gato’ Silva», puntualizó.
En cuanto al partido, el otrora jugador de FC Barcelona reconoció que al imponer un esquema conservador no pudo tener «profundidad» para vulnerar la portería rival. «Nuestro plan consistía en tener en el centro del campo la mayor cantidad de gente posible para tener el control general del partido, con la posesión de la pelota, que esa cantidad de jugadores impidiese que Vélez desarrollara el juego: en líneas generales se logró eso, pero esa gente en el medio nos impidió tener la profundidad a la que estamos habituados», admitió.
Por último, el estratega también reconoció que no hubo precisión en la portería de Barovero. «No tuvimos ni la frescura ni la precisión que se necesita para marcar goles, tenemos que reconocer que tampoco tuvimos muchas situaciones que nos hubiesen invitado a tener esa precisión, porque el equipo rival se defendió muy bien y porque no encontramos el último pase con tranquilidad», sentenció.
Ahora el plantel se enfocará en el duelo del domingo ante Cobreloa en San Carlos de Apoquindo (18:30) por la 11° fecha del Torneo de Apertura y en el decisivo cotejo del próximo jueves ante la eliminada Unión Española en la misma cancha (19:30), donde un triunfo le bastará para asegurar su clasificación por primera vez a octavos de final de Copa Libertadores tras nueve años sin estar en esa instancia.
