Los legisladores opositores coincidieron en la preocupación que tienen ante la “pasividad del gobierno frente a temas tan sensibles como el mercado financiero”.
Los diputados DC, Fuad Chahín y Pablo Lorenzini, acompañados del presidente de la Conadecus, Hernán Calderón, hicieron un balance del primer año de gestión del Presidente Sebastián Piñera en materia económica, señalando que fue «el año en que los consumidores perdieron una y otra vez, un año nulo».
Según señaló Lorenzini, «ya que este primer año el enfoque estuvo puesto en otros temas, incluyendo obviamente a las grandes empresas, esperamos que este año el gobierno sí opte por los consumidores, son muchos los problemas económicos que hoy enfrentan las familias chilenas, especialmente la clase media. Se necesita fortalecer con recursos y mayores atribuciones a las entidades reguladoras y, también, apoyar a las organizaciones de consumidores que están haciendo una tarea titánica frente a los grandes conglomerados».
Agregó que «este fue el año en que los bancos se hicieron famosos por las altas tasas de interés; el año en que hemos visto no sólo un explosivo aumento en el precio del pan y otros productos, sino que un SIPCO que no funciona y que encarece semanalmente las bencinas: el año de las ventas atadas y de la falta de transparencia en este mercado. Un periodo en el que las Isapres volvieron a subir sus planes, en que aumentaron, además, las denuncias de abusos en el retail y la banca, proliferando también las demandas colectivas contra empresas de servicios básicos; un año en que, definitivamente, los consumidores y las familias chilenas siguen asumiendo los efectos de un mercado poco transparente y con escasa regulación”.
Por su parte, el diputado Chahín agregó que «nos preocupa la pasividad del gobierno frente a temas tan sensibles como el mercado financiero. El episodio de las ventas atadas, con circulares que nadie entendió, sólo los bancos, nos llevaron incluso a pedir un sumario contra el Superintendente de bancos. Aquí, lo primero debe ser evitar los abusos y terminar con ese enorme listado de arbitrariedades de los bancos en perjuicio de sus clientes, que muchas veces viven un verdadero secuestro financiero por parte de las instituciones bancarias».
Además, Chahín se refirió a la situación del precio de los alimentos, manifestando su preocupación por los sectores más vulnerables.
«Sabemos que si el IPC ha aumentado, el IPC de los pobres lo ha hecho, obviamente, en una mayor proporción. Cuando citamos a los ministros a la Cámara por este tema, no fueron, se excusaron, reflejando un nulo interés frente a la preocupación de millones de consumidores», explicó.
Por otra parte, el presidente de la Conadecus, Hernán Calderón, junto con coincidir en un balance «nulo», planteó la idea de establecer normas especiales para los consumidores en caso de crisis. Así como existe una ley de quiebras para las empresas, que las ayuda a salir de los problemas, que exista una normativa similar para que los consumidores puedan enfrentar con mayor tranquilidad la crítica situación en que se encuentran.
