El el líder del gremialismo aseguró que «proyectos emblemáticos como el descuento del 7% a los jubilados, y los anuncios que vienen en educación nos van a ayudar a darle un impulso hacia arriba al Gobierno», mientras su par RN sostuvo que los rechazos y las aprobaciones «son verdaderas peinetas políticas».
Los presidentes de RN y la UDI, Carlos Larraín y Juan Antonio Coloma le bajaron el perfil a la nueva baja en la aprobación al Gobierno que reveló la encuesta CERC conocida este martes, destacando que no hay que darle mayor importancia a lo que arrojan los sondeos, y que la mirada está puesta mayormente en las dificultades que enfrentan los ciudadanos.
Larraín manifestó que «los rechazos y las aprobaciones se mueven con una velocidad tremenda, son verdaderas peinetas políticas y yo, francamente, no viviría pendiente de las encuestas, nos podemos marear».
«Lo importante es tener un ideario de trabajo para el Gobierno y seguir impulsándolo, y luego nos vamos a ver con porcentajes más amplios de aprobación», añadió.
En tanto, el líder del gremialismo sostuvo que el estudio dio a conocer «datos parecidos a los que hemos tenido en el último tiempo. No cabe duda que proyectos emblemáticos como el descuento del 7% a los jubilados, y los anuncios que vienen en educación nos van a ayudar a darle un impulso hacia arriba al Gobierno, que es lo que buscamos».
«Nosotros no vivimos mirando las encuestas, vivimos mirando los problemas de los chilenos; y tenemos confianza en que vamos a salir adelante unidos», acotó.
Ambos formularon estas declaraciones luego de la primera de las citas de coordinación entre las directivas de ambas colectividades que habían anunciado para los martes, con el fin de «consolidar la institucionalidad» de la Coalición por el Cambio.
Después del encuentro se informó que durante los próximos meses se planificarán distintas convenciones regionales, para analizar temas relevantes para el bloque oficialista, como la regionalización y el tema agrícola.
Además, se anunciaron visitas de las directivas de RN y la UDI a las zonas extremas del país, con el fin de recoger las problemáticas propias de cada lugar.
«Vamos a encauzar nuestros esfuerzos en temas que sean de unidad para las regiones, que les toca poco al momento de las reparticiones», enfatizó Larraín.
