Las dos selecciones llegarán al encuentro, que se disputará en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza con la tranquilidad de saber que no está en juego su continuidad en la competencia, pero sí la posibilidad de tomar posiciones que decidirán al rival que enfrentarán en los cuartos de final.
Perú y Chile, con la clasificación a la siguiente etapa de la Copa América ya asegurada, chocarán este martes en un ‘Clásico del Pacífico’ que permitirá conocer a la selección que ocupará el primer lugar del Grupo C del torneo.
Las dos selecciones llegarán al encuentro, que se disputará en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza con la tranquilidad de saber que no está en juego su continuidad en la competencia, pero sí la posibilidad de tomar posiciones que decidirán al rival que enfrentarán en los cuartos de final.
En ese sentido, Perú se ha mantenido más cauteloso, con el anuncio de varios cambios en su alineación titular, mientras que Chile remarcó que buscará una victoria porque su intención es ganar el Grupo C.
El seleccionador peruano, Sergio Markarián, ratificó que mantendrá su política de «rotación» de jugadores e incluso piensa enviar a algunos de los más jóvenes, que convocó para el torneo ante la lesión de figuras como Claudio Pizarro y Jefferson Farfán.
En la portería, Salomón Libman, portero del Alianza Lima, reemplazará a Raúl ‘Supermán’ Fernández, del Niza francés y titular en los partidos que Perú empató 1-1 con Uruguay y venció por 1-0 a México.
Antes de conocerse el triunfo de Colombia sobre Bolivia, que le dio a Perú y Chile el pase a la siguiente etapa, Markarián había señalado que contemplaba dos escenarios para el partido de mañana: el primero con la necesidad de obtener, cuando menos, un punto, y el otro, con el pase ya asegurado.
En ese sentido, el seleccionador anunció ayer que el creativo Michael Guevara reemplazará al polifuncional Rinaldo Cruzado, quien sufrió un golpe en el partido disputado el viernes frente a México, mientras que también estudia la posibilidad del ingreso del joven Raúl Ruidiaz por el goleador Paolo Guerrero.
Markarián espera, de esa manera, resguardar y darle un descanso a sus principales figuras y, también, evitar que alguno sume una segunda tarjeta amarilla en esta primera fase, ya que tiene cinco jugadores amonestados.
Chile, por su parte, mantiene su ritmo de intensos entrenamientos, a los que sumó la práctica de remates desde larga distancia, bajo la premisa de que Perú saldrá con un esquema conservador a tratar de cerrarse en el fondo y buscar los contragolpes.
En ese sentido, jugadores como Humberto Suazo y Pablo Contreras remarcaron que no especularán con el resultado, ya que su objetivo es terminar en el primer lugar de la serie.
El equipo dirigido por el argentino Claudio Borghi podrá utilizar al medio Jorge Valdivia, recuperado plenamente de una lesión, aunque mantiene la duda sobre Mauricio Isla y Matías Fernández, afectados por problemas físicos.
Si Fernández no está apto para alinear ante los peruanos, Borghi mantendrá en el terreno de juego a Luis Jiménez, quien lo sustituyó el viernes pasado frente a Uruguay.
Más allá de esos detalles, el ambiente en la selección chilena siguió siendo de los mejores y el optimismo se mantiene a tope, tal como ha señalado Contreras al afirmar que Chile es una de las selecciones que mejor juego ha mostrado y, por eso, está entre las favoritas a ganar la Copa América.
A pesar de que el Malvinas Argentinas estará abarrotado por hinchas chilenos, que han llegado por miles hasta Mendoza, los jugadores de ambas selecciones han señalado que el partido se decidirá en la cancha y pidieron descartar cualquier tono de enfrentamiento más allá del deportivo.
Incluso Sergio Markarián salió ayer al paso para pedirles a los periodistas que moderen el tono de sus informaciones, para luego remarcar que tiene grandes amigos en Perú y Chile y señalar que «solo (se trata) de un partido de fútbol».
