El empresario asegura que “cuando los gobiernos los suben es porque creen importante hacerlo. Espero que quienes están manejando las finanzas públicas hagan lo que tengan que hacer y si mañana el país requiere mayor financiamiento para proyectos nuevos, claramente, si queremos mantener un equilibrio fiscal, es por el lado tributario donde se puede financiar” y advierte que “si la reforma es nada más que por razones políticas, me parece que no ayuda al país”.
El empresario Andrónico Luksic aseguró que no le molesta la posibilidad que se realice una reforma tributaria para poder financiar nuevos proyectos sociales, pero se molesta si esta alza de impuestos está destinada a razones políticas.
En una entrevista en El Mercurio, Luksic precisa que a él nunca le han preguntado si quiere o no una alza de tributos, añadiendo que “cuando los gobiernos los suben es porque creen importante hacerlo. Espero que quienes están manejando las finanzas públicas hagan lo que tengan que hacer y si mañana el país requiere mayor financiamiento para proyectos nuevos, claramente, si queremos mantener un equilibrio fiscal, es por el lado tributario donde se puede financiar”.
Sin embargo, advierte que “si la reforma es nada más que por razones políticas, me parece que no ayuda al país”.
El empresario sostiene que a nadie le gusta que le cambien las condiciones, pero “obviamente hay que entender que las cosas cambian, que hay nuevas demandas, nuevas necesidades y eso hay que financiarlo, en especial, si como país no queremos usar los recursos soberanos y además nos interesa tener un país con buena educación”.
Además, le endosa la responsabilidad de realizar la reforma tributaria a Piñera, afirmando que quien “corta el queque es el Presidente de la República y él dirá si se suben o bajan los impuestos”.
Respecto a la situación que enfrenta el país con las movilizaciones sociales, el empresario asegura que aprecia un Chile desunido, con una gran cantidad de intereses diversos, “no veo que haya un trabajo de unidad. También creo que seguimos siendo un tremendo país. Hay que cuidarlo”.
En su análisis sobre la situación contingente, Luksic sostiene que la gente en la actualidad tiene una menor paciencia y no está dispuesta a esperar por un tiempo largo para que se solucionen sus problemas.
“La gente quiere las cosas para hoy, no quiere las cosas para sus hijos, sino para ellos y también para sus hijos. Y eso obviamente genera una tensión importante en el país. Es algo nuevo, no lo habíamos vivido nunca. Pero esto no se arregla con una vara mágica, es parte de un proceso de crecimiento y ese crecimiento deriva en bienestar”.
Además, cree que el desafío que presenta el país es la de tener una agenda común, “transversal, que todos empujemos el carro para el mismo lado. Eso no existe. Falta consensuar una manera de hacer las cosas”.
En ese sentido, Luksic dijo que “los empresarios no podemos tener una agenda distinta a la que tiene el país. Si empezamos con una agenda propia, no vamos a sumar. Y si hay que empujarla, debemos hacerlo desde los organismos gremiales. El rol que nos corresponde es de continuar desarrollando empresas, seguir ayudando a generar crecimiento en Chile, con una visión de responsabilidad social más amplia, tomando un mayor compromiso en esta área”.
Respecto a un balance sobre el gobierno de Piñera, el empresario explica que el país sigue avanzando en la senda del crecimiento, ordenado, ejemplar en término de las finanzas públicas y “tenemos un buen gobierno, un gran Presidente con ganas de hacer muchas cosas y a lo mejor ese puede ser el problema. No se pueden hacer tantas cosas en cuatro años”.
