Publicidad

La gran jugada de Larraín que desencaja a la UDI

Claudia Rivas Arenas
Por : Claudia Rivas Arenas Periodista de El Mostrador @crivasa
Ver Más

En una audaz y pragmática jugada, el conflictivo timonel, pasó de emblema del conservadurismo inmovilista al de líder, posibilitando la desconcentración del poder demandada por el país. Con eso, no sólo deja al gremialismo como único defensor del statu quo heredado de Pinochet, sino que da un tremendo paso hacia su viejo sueño: una alianza política de la derecha más tradicional con la DC, tal como ocurre en buena parte del mundo occidental.


La alianza entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana -con miras a un acuerdo en materia de reformas políticas y el cambio del sistema binominal- dejó claro que el presidente de la tienda oficialista, Carlos Larraín, sigue conservando el poder. Ésto a pesar de los esfuerzos de la disidencia por debilitarlo. Asimismo, si bien en la Concertación, algunos admiten que la forma como se llegó a este episodio no fue la más adecuada, mayoritariamente están de acuerdo con el fondo. Están convencidos que éste es el momento histórico para cambiar el actual mecanismo electoral y estiman que no habrá otra oportunidad más propicia para ello. Y, lejos de lo que ninguno hubiera esperado hasta hace un par de días, será uno de los dirigentes más conservadores de la coalición gobernante quien encabece este proceso. Muy a pesar de sus socios de la UDI. Esta maniobra es aplaudida por su sector como una clara muestra del “reposicionamiento del liderazgo” interno del senador.

Dirigentes de la casona de Antonio Varas hacen un balance de lo sucedido durante la jornada de ayer. Están conscientes que generaron un tremendo revuelo político y lamentan se haya deteriorado la relación con sus aliados naturales: la UDI. Incluso el vicepresidente de la tienda, Francisco Chahuán, hizo “un llamado desde el centro político, una invitación, a la UDI, al gobierno y al resto de los partidos políticos” a sumarse a este esfuerzo RN-DC. Después de tres meses de trabajo, intercambio de documentos y cenas en las casas de algunos dirigentes de ambos partidos, en Renovación están convencidos que se avanzará sobre importantes cambios, aunque sea sin sus aliados. Entre los integrantes de esta especie de cofradía que preparó el acuerdo -además de Larraín y Chahuán- están Baldo Prokurica y Mario Desbordes; y los DC Soledad Alvear, Andrés Zaldívar, Jorge Pizarro, Gutenberg Martínez y Jorge Burgos.

Esta inesperada conferencia de prensa conjunta de ambas directivas provocó inmediatos efectos colaterales. Por un lado, internamente, Larraín se impuso no sólo dentro del partido, sino también asumió un importante liderazgo en el conjunto del oficialismo. Lo que habría quedado de manifiesto, según la lectura que dan en el entorno del timonel, es que su sociedad con la UDI impedía avanzar en el acuerdo de las reformas políticas, con el cambio al binominal como la más importante. Mientras Larraín no cortara ese lazo con el timonel de la UDI, Juan Antonio Coloma, para el gobierno se hacía imposible avanzar, sostienen. Y dan por descontado que a pesar del respaldo de la derecha liberal y los independientes no alcanzaban los votos para cambiar el sistema electoral. Estos mismos creen que ahora se podrá avanzar rápidamente en la búsqueda de una fórmula que permita un acuerdo lo más amplio posible.

Por otra parte, dirigentes de la tienda evalúan que Larraín le ganó el punto a la disidencia parlamentaria que siempre ha tenido como bandera de lucha interna el cambio al binominal y que cuando vio al Presidente Sebastián Piñera acorralado por la UDI no dudó en salir a respaldarlo públicamente. Aunque en el entorno del cuestionado timonel aclaran que ese fue “un efecto colateral no buscado”. De hecho, los rostros de la disidencia en el Congreso festejaron cuando conocieron este acuerdo entre su partido y la DC. La senadora Lily Pérez valoró el “cambio de actitud” de Larraín y se manifestó “contenta de que (Larraín y su sector) se sumen al llamado que hicimos hace una semana”. Y recalcó que lo importante es que hayan cambiado de opinión quienes antes se oponían de plano a las reformas políticas, aludiendo implícitamente a la voltereta del timonel.

[cita]Una situación divertida refleja el mal ambiente que reina entre estos extraños aliados que permanecen juntos, según algunos críticos de RN, sólo gracias al binominal. En un momento que Carlos Larraín pasaba por fuera del Comité de la UDI con destino a la Sala, justo salía el senador Novoa y se produjo el siguiente diálogo: “¿Cómo está don Carlos?”, “Bien, contento”, responde Larraín. Acto seguido y en tono más alto para que lo alcanzara a escuchar el timonel RN que caminaba acompañado de un periodista, Novoa preguntó: “¿Dónde te vas a sentar hoy día?”, aludiendo al acuerdo con la DC.[/cita]

La UDI con pintura de guerra

A pesar de que sus aliados se manifestaron sorprendidos, en RN aseguran que se le había comentado a Coloma lo que estaba pasando, aunque en “términos generales”. Con la movida del máximo dirigente de la casona de Antonio Varas, la UDI está quedando aislada. Algo que el partido más grande de la coalición oficialista no se parece estar dispuesto a aceptar de buenas a primeras. Considerando que todas las señales apuntan a que tendría que comenzar a ceder en varios aspectos. El más duro en manifestar la molestia de la tienda, el primero en dar declaraciones respecto de lo que sucedía en Santiago, fue el nuevo jefe de la bancada de diputados gremialista, Felipe Ward Edwards.

Ward reconoció que este episodio “sorprende negativamente”, porque no se condice con los acuerdos alcanzados al interior de la Alianza estos últimos días. “Qué pasó hoy día, es una pregunta que todos nos estamos haciendo. Y es una explicación que tiene que entregar el presidente de Renovación Nacional”, advirtió, asegurando que “esto no dice relación con las conversaciones que hemos tenido durante el último tiempo; no dice relación con lo que hemos conversado en el comité político y, además, es algo completamente distinto al intento de solución que hemos planteado después de la reunión del comité político de antes de ayer, en orden a ponerle paños fríos a este tema y a fijar un procedimiento de trabajo que nos permita consensuar una posición”, insistió visiblemente molesto.

Ward hizo un emplazamiento a Larraín similar al pronunciado por el senador gremialista Jovino Novoa la semana pasada a los disidentes de RN. Y fue más allá, asegurando que “salir con este domingo siete sin haberle anunciado a nadie, tensionará aún más las relaciones dentro de la Alianza. (…) nos abre un nuevo escenario”. Además, dejó en claro que “no es un atenuante el que (Larraín) haya notificado a nuestro presidente de lo que iba a ocurrir. Esto rompe las reglas del juego”. Por su parte, Novoa reiteró lo que ha sido su permanente discurso en esta materia: “Este gobierno no fue elegido para hacer reformas políticas, fue elegido para mejorar las condiciones de vida, la seguridad, el empleo y el desarrollo. Yo señalé que no es bueno romper los esquemas de las alianzas políticas, que si algunos parlamentarios deciden hacer un pacto con la Concertación no es bueno para el país. Tampoco es bueno que un partido de una alianza haga pactos con un partido de la otra alianza, crea ruido en las dos coaliciones”.

Pero lo que dejó en evidencia la molestia de los aliados fue la puesta en escena que, en la tarde de ayer hizo Coloma. Flanqueado por el secretario general del partido, Víctor Pérez; y por los jefes bancada Hernán Larraín y Felipe Ward, el timonel gremialista advirtió, con tono sereno pero firme, que “hemos sido expresamente explícitos en cuanto a lo que nosotros entendemos por unidad y hemos dado muestras, una y otra vez, de favorecer los entendimientos al interior de la coalición. No es fácil gobernar, pero es muy importante hacerlo bien. Y para eso la unidad es el camino y por eso cuando esa unidad no se ve reflejada  en los hechos políticos, obviamente que uno se sorprende, se inquieta, se preocupa y obviamente lo rechazamos”.

Una situación divertida refleja el mal ambiente que reina entre estos extraños aliados que permanecen juntos, según algunos críticos de RN, sólo gracias al binominal. En un momento que Carlos Larraín pasaba por fuera del Comité de la UDI con destino a la Sala, justo salía el senador Novoa y se produjo el siguiente diálogo: “¿Cómo está don Carlos?”, “Bien, contento”, responde Larraín. Acto seguido y en tono más alto para que lo alcanzara a escuchar el timonel RN que caminaba acompañado de un periodista, Novoa preguntó: “¿Dónde te vas a sentar hoy día?”, aludiendo al acuerdo con la DC.

Si bien en RN aseguran que nunca se pensó en aislar a sus socios de pacto, también admiten que este trabajo conjunto con la DC le permite soñar a RN con avanzar más adelante hacia lo que han llamado la “coalición de partidos de centro”, pese a que los aludidos descartan un escenario similar. Aún así, en el entorno del timonel explican que el cambio al sistema binominal permitirá paralelamente “la flexibilidad de los sistemas de alianzas”, por lo que sueñan en poder concretar el anhelo que tanto Larraín como otros de sus cercanos, Francisco Chahuán entre ellos, han expresado públicamente: un pacto de gobierno con la Democracia Cristiana. Algo que es percibido como otro efecto colateral positivo.

Esquirlas en la Concertación

Aunque este episodio resultó también inesperado para gran parte de la Concertación, en este pacto se lo tomaron con calma. Sólo en el Partido Socialista se generó un poco más de polémica, porque el secretario general de la colectividad, senador Fulvio Rossi, y el vicepresidente, diputado Marcelo Díaz, expresaron su molestia por la forma como se desarrolló este proceso y su culminación. Pero el timonel, el diputado Osvaldo Andrade, salió a respaldar el acuerdo RN-DC.

Andrade señaló que “yo tengo en política muchos años y tengo mucha claridad, sobre todo cuando uno cumple el rol de presidente de un partido de separar muy claramente lo principal de lo accesorio. Aquí lo principal es el contenido del acuerdo, aquí lo principal es que un partido de derecha, el partido en que milita el Presidente de la República, nos ha señalado que está dispuesto al cambio del sistema electoral binominal”.

Lo que, aparentemente, no es casual. Porque fuentes de la DC aseguran que “esto es parte de nuestro acuerdo con el Partido Socialista. Ellos consiguen acuerdos con la izquierda y nosotros con la derecha”.

Publicidad

Tendencias