«Como familia sentimos que no hemos podido vivir nuestro duelo como corresponde y como deberíamos vivirlo al 100 por ciento, por el hecho de que no tenemos justicia», aseguró la hermana del joven que murió producto de un disparo policial.
La familia de Manuel Gutiérrez, el estudiante que murió tras ser impactado por una bala de Carabineros al cierre del paro nacional del 24 y 25 de agosto de 2011, solicitó al Presidente Sebastián Piñera que se haga justicia en el caso.
El deceso del joven se produjo en la Posta 4 de Ñuñoa, hasta donde llegó la madrugada del viernes 26 de agosto, luego de haber recibido un balazo en el tórax en una pasarela de Américo Vespucio con Amanda Labarca, en la población Jaime de Eyzaguirre de la comuna de Macul. A ese lugar había llegado acompañando a su hermano con discapacidad para presenciar las protestas.
Su familia y amigos marcharon este miércoles desde la Plaza de Armas hasta La Moneda, para entregar una carta en la que piden la renuncia del ministro del Interior y Seguridad Pública, Rodrigo Hinzpeter, la cárcel efectiva para el carabinero que le disparó y reformar la justicia militar.
Según consignó Radio Cooperativa, la hermana del estudiante, Jacqueline Gutiérrez, sostuvo que «como familia sentimos que no hemos podido vivir nuestro duelo como corresponde y como deberíamos vivirlo al 100 por ciento, por el hecho de que no tenemos justicia».
«Para nosotros Manuel todavía está en el limbo, todavía no lo podemos llorar con la paz que deberíamos llorarlo», comentó.
El 29 de agosto del año pasado fue dado de baja el sargento segundo de Carabineros, Miguel Millacura Cárcamo, después de reconocer que efectuó dos tiros al aire en las inmediaciones donde fue impactado el joven, lo que intentó ocultar las primeras horas. Adicionalmente, se decretó dar de baja de la institución a los cabos segundos Patricio Bravo Muñoz y Francisco Vásquez Flores, así como del Carabinero Williams Rodríguez. También, se llamó a retiro a la subteniente Claudia Iglesias y se pidió a Carabineros que solicitase la renuncia a Sergio Gajardo. Por su parte, Eduardo Gordon, entonces general director de la institución renunció días mas tarde, tras conocerse una supuesta intervención a favor de un hijo que cometió una infracción de tránsito.
En noviembre la Corte Marcial dejó en libertad a Miguel Millacura. El tribunal castrense determinó que era suficiente el tiempo que el ex uniformado había pasado bajo arresto, por lo que estimó que deberá esperar en libertad el resto del proceso que se instruye en su contra.
