Dirigentes de comunidades damnificadas de Talca, Constitución, Rancagua, Concepción y Santiago, entregaron los resultados a La Moneda.
Los voceros de la Red de Organizaciones pro Reconstrucción y dirigentes de organizaciones de damnificados del sur del país, dieron a conocer hace algunos días los resultados de la Consulta Nacional sobre Reconstrucción, que se llevó a cabo entre el 25 de febrero y el 4 de marzo, y en la cual votaron más de 12 mil personas.
La principal conclusión de los organizadores después del análisis de los datos, es que existe una percepción ciudadana extremadamente negativa tanto del proceso como del Plan de Reconstrucción del Gobierno. La consulta revela también, que la ciudadanía piensa que el Plan debe ser transformado sustancialmente, creando nuevas políticas públicas, invirtiendo más recursos y aumentando la participación ciudadana. Además, los resultados dan cuenta de que la ciudadanía no confía en que el Estado esté mejor preparado para enfrentar una nueva catástrofe.
Sobre la percepción del proceso de reconstrucción, el 78% de los votantes manifiesta un alto descontento. De ellos, el 43% sostuvo que el proceso ha sido «pésimo y muy lento»; el 35% declaró que lo consideraba «malo y lento», el 15% lo calificó como «bueno, pero no muy rápido», y un 3% lo ve «excelente y rápido». Particularmente, sobre el Plan de Reconstrucción del Gobierno, el 42% de los 12 mil votantes, lo consideró «pésimo», y el 31% opinó que «no es bueno, pero algo hacen”.
Al respecto, Carolina Manríquez, dirigenta de Constitución, señaló: «Los resultados de la consulta son coherentes con la realidad y el descontento que vivimos los damnificados del país, no se puede seguir tapando el sol con un dedo. Es hora de que el gobierno reformule el Plan de Reconstrucción y acepte la colaboración de la ciudadanía».
En cuánto a la pregunta respecto a las medidas que debiera tomar el gobierno para mejorar el Plan de Reconstrucción, la consulta incluía cuatro alternativas: crear políticas y estrategias más eficientes; organizar espacios de participación ciudadana en que las decisiones tomadas sean realizadas; entregar más recursos y más rápidamente y todas las anteriores. En esta pregunta un 55% de los votantes marcó la alternativa «todas las anteriores», el 20% privilegió los espacios de participación ciudadana; el 15% el aumento de recursos y el 8%, la eficiencia de las políticas públicas. Sólo un 2% declaró que no había nada que mejorar. Para los organizadores, el 55% mencionado manifiesta que la ciudadanía quiere cambios profundos y estructurales en el plan de reconstrucción.
A esto se suman los resultados de la cuarta pregunta que evaluaba los espacios de participación existentes. El 58% optó por la alternativa «no han habido muchas oportunidades de participación, a pesar de que la ciudadanía las ha solicitado».
Respecto a ese punto, Iván Salazar, coordinador nacional del Programa Ciudades Sustentables de Fundación AVINA, destaca lo importante que fue abrir este espacio de participación ciudadana a través de la sociedad civil. “El éxito de esta experiencia es un golpe anímico para las comunidades afectadas, pues ven la oportunidad que la sociedad civil demuestre a las autoridades que puede participar activamente a través de vías propositivas, y no violentas”, señaló.
En ese mismo punto enfatiza Jaime Díaz, dirigente de la Villa Olímpica: «Es evidente que la ciudadanía demanda espacios de participación vinculante». Además señaló que «hay 135 planes maestros a lo largo del país, que aún no se ejecutan, y ninguno considera la opinión de los habitantes de esos lugares. Nosotros no somos ni queremos ser espectadores de las discusiones politizadas entre la derecha y la oposición en materia de Reconstrucción. Cómo dirigentes sociales y damnificados, también tenemos opiniones y balances; pero lamentablemente estas percepciones no han estado presentes en el debate público. Es por eso, que hemos hecho el esfuerzo de organizar esta consulta, porque queremos ser escuchados y tomados en cuenta, no sólo para los aniversarios del terremoto”.
En este mismo sentido, Nicolás Valenzuela, director de la ong Reconstruye advirtió que “la reconstrucción debe mantenerse en el debate público, porque hay miles de chilenos para quienes el terremoto no ha terminado. Y la reconstrucción no termina con la entrega de los 220 mil subsidios. La experiencia de los propios dirigentes da cuenta de que hay una cantidad muy importante de familias damnificadas y vulnerables, que están quedando fuera del plan de reconstrucción”.
La quinta pregunta señalaba «¿Piensa usted que estamos mejor preparados para enfrentar una catástrofe natural después de lo aprendido con el terremoto/tsunami del 27 de febrero del 2010?». Al respecto, el 45% de los votantes consideró que las personas estaban mejor preparadas, pero el Estado no; y el 33% opinó que todo sigue igual.
«La apreciación de más del 80% de los participantes en la Consulta, considera que aún nos encontramos en una situación de fragilidad institucional que no ha cambiado después del terremoto», dijo Patricia Beltrán, directora ejecutiva de Reconstrucción Cómo Vamos, y agregó «durante las última semanas, el debate ha estado concentrado en el número de viviendas, pero la reconstrucción también tiene otras aristas como es la prevención de riesgos y la planificación de las ciudades. Y estas no constituyen una prioridad nacional pese a que vivimos en uno de los países más sísmicos del mundo».
