El vocero Misael Ruiz sostuvo que mientras ellos fueron a dialogar a Coyhaique, personal de la policía uniformada provocó a los manifestantes que se quedaron en Puerto Aysén, lo que posteriormente generó los enfrentamientos. Situación que, a su juicio, sirvió al Gobierno para no sentarse a negociar. Autoridades de Palacio evaluan la presentación de querellas invocando la Ley de Seguridad Interior del Estado y se interpondrían individualizando a los responsables de los bloqueos.
El vocero del Movimiento Social por Aysén, Misael Ruiz, se refirió a los nuevos enfrentamientos entre pobladores y las Fuerzas Especiales de Carabineros, señalando que fueron “sobrepasados” por una ciudadanía que se aburrió de esperar.
En entrevista con Radio Agricultura, el dirigente aclaró que mientras ellos fueron a dialogar a Coyhaique, personal de la policía uniformada provocó a los manifestantes que se quedaron en Puerto Aysén y se generaron enfrentamientos. Situación que, a su juicio, sirvió al Gobierno para no sentarse a negociar.
“Lo que hemos hecho todo este tiempo es llamar a la calma, no somos los que estamos quebrando la mesa. Aquí el Gobierno buscó esta instancia para no sentarse a conversar con nosotros, porque ellos no tienen propuestas para esta región”, sostuvo.
“Como mesa de trabajo no podemos hacer absolutamente nada y en este minuto fuimos sobrepasados por las bases, porque la gente se cabreó de esperar, un mes llevamos de movilización”, agregó Ruiz.
“No es culpa de nosotros, sino de este Gobierno que no ha sabido hacer las cosas bien y eso está demostrado, porque si el Gobierno traía tantas maravillas para nuestra región por qué tendría que seguir esto, pero lamentablemente nosotros aquí fuimos sobrepasados por las bases (…) si interveníamos corríamos el peligro de que la gente se vaya en contra de nosotros”.
Asimismo, el vocero del Movimiento Social insistió en que están dispuesto a conversar: “Hay mucha rabia y mucha decepción, no sé si aquí al Presidente se le esconden las cosas, porque él sacó un 60% en esta región, fue la primera mayoría del país. El 99% de esta región está con esta demanda, hicimos lo humanamente posible para seguir dialogando, y vuelvo a hacer el llamado al Presidente: estamos dispuestos a trabajar”.
Luego de las agresiones verbales por parte de los dirigentes a las autoridades y los incidentes que se registraban en Aysén, el gobierno decidió cancelar la mesa de diálogo en Coyhaique.
Asimismo, La Moneda dispuso el regreso a Santiago del ministro de Energía, Rodrigo Álvarez. A juicio del Ejecutivo el ambiente de agitación impide avances concretos y los principales interlocutores del movimiento parecen estar perdiendo el control de sus bases.
«Queda sentado que esta mesa, que se arroga la representación de Aysén, no tiene ninguna capacidad de controlar ni de comprometerse a trabajar por construir propuestas y avances que beneficien a la región», sostuvo el Gobierno.
De igual forma, las autoridades de Palacio evaluan la presentación de querellas invocando la Ley de Seguridad Interior del Estado y se interpondrían individualizando a los responsables de los bloqueos.
