La cita con Hinzpeter y Chadwick generó la primera fisura en la organización de los vecinos de la región patagona. La negativa a terminar con los bloqueos sería la principal motivación de pescadores a abandonar la mesa, algo que ha llevado al gobierno a presionar a los dirigentes para “aislar” a quienes rechazan normalizar el orden público en la zona. Además el dirigente Dagoberto Castillo acusa el cambio de un documento y la inclusión en las negociaciones de un petitorio que ellos no comparten.
La unidad del Movimiento Social por Aysén ha sido destacada por sus dirigentes desde que iniciaron las protestas el pasado 12 de febrero. Poco a poco las movilizaciones crecieron, los aiseninos ganaron apoyo de amplios sectores de la ciudadanía e hicieron gala de esa cohesión en las negociaciones con el gobierno.
A mediados de mes, el diálogo con el Ejecutivo se quebró tras una dura disputa en la que los dirigentes del movimiento se negaron a dividir la mesa que integran más de veinte organizaciones vecinales, gremiales y sociales de la región patagónica. El gobierno aspiraba entonces a un análisis sectorial de sus propuestas.
El 13 de marzo invitaron a los pescadores a la Gobernación Provincial de Aysén, en la comuna de Puerto Aysén, a una cita que debía encabezar el subsecretario de Pesca, Pablo Galilea. Aquel día los representantes del sector llegaron a la reunión para excusarse. No participarían de ninguna negociación respecto al tema de pesca, mientras el subsidio que piden para los combustibles no se zanjara en las negociaciones.
A más de un mes del comienzo de las movilizaciones en la región patagónica, el gobierno no ha desistido de su interés en un análisis sectorial de las propuestas y así lo hizo saber la noche del jueves, el vocero Andrés Chadwick, tras la reunión con los representantes del movimiento en La Moneda.
Esa cita generó la primera fisura en la organización de los vecinos de Aysén. La negativa de pescadores artesanales a terminar con los bloqueos sería la principal motivación, algo que ha llevado al gobierno a presionar a los dirigentes para “aislar” a los sectores que rechazan normalizar el orden público en la zona.
El representante de la Asociación Gremial de Pescadores Artesanales de Puerto Aysén, Renato Flores, anunció que no seguirán formando parte de la mesa social. “Sentimos que al irse ellos o viajar sin informarnos fue una traición para nosotros y estamos muy dolidos. Esperábamos por parte de nuestros compañeros una señal clara de decir se desbloquea por tal y tal motivo”, indicó Flores. Además explicó que “el representante de una gran parte de pescadores acaba de renunciar y nosotros, nuestra organización, también se retira de la mesa y le retiramos la confianza a nuestros representantes, Misael (Ruiz) e Iván (Fuentes). Ya no nos representan a nosotros ni los intereses de la pesca artesanal”.
Dagoberto Castillo, el dirigente mandatado a renunciar anunció que solicitarían al subsecretario Galilea para que se les asignara el diálogo sectorial del tema pesca artesanal. Castillo representaba en la mesa al 80% de los pescadores de la región. «La principal molestia de las bases es que se cambió el documento original firmado por toda la pesca artesanal y se incluyó un petitorio no compartido por la mayoría del sector pesquero, por tal motivo no pertenezco más a la mesa social», indicó Castillo a Emol.
Consultado en TVN por el tema, Iván Fuentes destacó que “la Patagonia somos mucha gente, por lo tanto siempre va a haber un grupo que con justas razones va a decir: no, me quiero ir. Nosotros hemos hecho muchos gestos y hoy día al gobierno le estamos pidiendo gestos”.
En otra intervención del vocero, consultado en Radio Agricultura, por los dichos del ministro Chadwick que sugirió aislar a los que no quieran desbloquear las rutas, comentó: «Nosotros no queremos aislar a nadie, queremos que la gente que no se quiere desmovilizar… Definitivamente no aislarlos, que comprendan”.
