Ficción: En ningún país se subastan las cuotas de pesca. Realidad: En Estados Unidos y Nueva Zelanda se subastan, y es visto como el siguiente paso en administración de cuotas de pescas. Además, en toda Europa y otras partes del mundo se subasta la pesca en primera venta.
La Asociación de Armadores de Buques Pesqueros y Empresas procesadoras de Productos del Mar (Anapesca) elaboró una serie de puntos que -a su juicio-diferencian los ‘mitos’ y la ‘realidad’ de la nueva Ley de Pesca que se debatirá en el Congreso Nacional.
1.- Ficción: Las cuotas se deben asignar por historia de captura. Realidad: En Chile dicha historia se «modificó» para mejorar a los que la modificaron.
2.- Ficción: Se debe otorgar permisos por concesión graciosa a quienes los tienen ahora porque cuidan mejor de los peces. Realidad: Los que tiene las cuotas ahora sobrepescaron casi todos los recursos valiosos en Chile.
3.- Ficción: En ningún país se subastan las cuotas de pesca. Realidad: En Estados Unidos y Nueva Zelanda se subastan, y es visto como el siguiente paso en administración de cuotas de pescas. Además, en toda Europa y otras partes del mundo se subasta la pesca en primera venta.
4.- Ficción: La subasta o licitación de cuotas permitirá que grandes transnacionales extranjeras se apoderen de la pesca. Realidad: Para poder pescar en aguas chilenas los barcos deben tener bandera chilena y sus dueños deben ser chilenos.
5.- Ficción: El Consejo Nacional de Pesca es una buena y útil institución que cuida de los recursos pesqueros. Realidad: El Consejo Nacional de Pesca está formado casi exclusivamente por los grandes industriales pesqueros, asesores de los mismos, sus empleados y sus trabajadores, y ha sido el principal responsable de la sobreexplotación pesquera en Chile.
6.- Ficción: La subasta o licitación de cuotas producirá concentración en la industria. Realidad: Es necesario aclarar que la industria ya está concentrada. En el norte queda sólo una empresa, en el centro cinco reales (luego de las fusiones) y en el sur sólo tres. La subasta permitiría acceso de otros actores a la pesca y disminuirá la concentración, más aun si se limita la misma.
7.- Ficción: Si no les regalan las cuotas de pesca a los grandes industriales y las subastan se producirá cesantía. Realidad: Los puestos de trabajo en la industria pesquera se relacionan con la cantidad de pesca, no con quien es dueño de las cuotas. Es mas, con las fusiones cada vez dan menos empleo.
8.- Ficción: La subasta de cuotas ha causado la sobreexplotación de los recursos. Realidad: Lo que ha llevado a la sobreexplotación de los recursos pesqueros ha sido la entrega cuotas muy superiores a lo recomendado por los científicos para la sustentabilidad de los recursos. Esto ha ocurrido tanto para los recursos licitados como para aquellos entregados gratis a los grandes industriales.
9.- Ficción: Al subastar transnacionales con barcos factoría, se llevarán la pesca. Realidad: Los barcos factoría están prohibidos por ley, sólo con la excepción en el extremo sur de Chile donde la mayor parte son extranjeros y los chilenos no tienen acceso a las cuotas, lo que si ocurriría con la licitación.
10.- Ficción: Que el Tribunal de la Libre Competencia (TDLC) señaló que la subasta de cuota no era necesaria. Realidad: El TDLC dijo que no era estrictamente necesaria la subasta, lo que señaló por cierto antes de las últimas fusiones que concentraron aún más el sector.
11.- Ficción: Los pescadores artesanales serán afectados negativamente si se les subasta las cuotas de pesca. Realidad: El Artículo 27 de la actual ley de pesca, está dedicado al sector industrial, por lo que la subasta, en el actual proyecto de ley, no afecta a los artesanales. En todo caso, al existir más actores aumentaría la demanda para los productos artesanales, lo que mejoraría los precios.
12.- Ficción: El jurel migró, por eso no hay, y tenemos que salir a pescarlo compitiendo con flotas extranjeras. Realidad: El jurel fue sobreexplotado dentro de las 200 millas debido a que las cuotas entregadas por más de una década por el Consejo Nacional de Pesca estaban muy por sobre la cantidad científicamente recomendada que permite la sustentabilidad del recurso
