La subida en la proyección del PIB, que en el Ipom del pasado diciembre dejó el emisor en un rango de entre un 3,75 y un 4,75 %, tiene como fundamento un escenario externo más favorable, con una recuperación parcial de la confianza en los mercados financieros.
El Banco Central de Chile elevó este martes en un cuarto de punto su previsión de crecimiento de la economía para este año, hasta un rango de entre un 4,0 % y un 5,0 %, aunque también elevó su proyección de inflación en 0,7 puntos porcentuales, hasta un 3,5 %.
Los datos están contenidos en el primer Informe de Política Monetaria (Ipom) de 2012, que el presidente del organismo emisor, Rodrigo Vergara, presentó este martes ante la Comisión de Hacienda del Senado, en Valparaíso.
La subida en la proyección del PIB, que en el Ipom del pasado diciembre dejó el emisor en un rango de entre un 3,75 y un 4,75 %, tiene como fundamento un escenario externo más favorable, con una recuperación parcial de la confianza en los mercados financieros, destacó Vergara.
A ello se agrega que la actividad y demanda internas han crecido más de lo que se preveía en diciembre.
En enero, la actividad aumentó un 5,5 % interanual, y para febrero, cuya cifra se conocerá el próximo jueves, las apuestas de analistas y el mercado fluctúan entre un 6,9 % y un 7,1 %, tras conocerse las últimas cifras de producción industrial (5,4 %) y desempleo (6,4 %).
Vergara advirtió que el emisor no sobrerreaccionará «a los datos puntuales que pudieran alentar olas de pesimismo u optimismo que afecten las expectativas de consumidores, empresarios o inversionistas».
Sobre esa base, «manejará la política monetaria con flexibilidad, conforme a las novedades del entorno económico internacional y local», remarcó.
Advirtió además sobre una trayectoria ascendente de la inflación, alimentada por el crecimiento de la actividad y la demanda y los cambios en precios específicos (petróleo, frutas y verduras frescas), además de que los riesgos del escenario externo «siguen siendo importantes».
La evolución reciente de la inflación (4,4 % en 2011) y variaciones de los precios al consumidor del 0,1 % y 0,5 % en enero y febrero, respectivamente, se explican por las tarifas del transporte y los precios de frutas y verduras frescas, dijo Vergara.
En esa línea, auguró que la inflación se ubicará en torno a un 3,5 % este año, que se compara con el 2,7 % previsto en diciembre, mientras que para 2013 se prevé una tasa del 3 %, en el centro del rango meta de entre 2,0 % y un 4,0 % que el emisor mantiene para un horizonte de 24 meses.
Precisó que «hasta entrado el segundo semestre» del año la inflación interanual oscilará en torno al 4,0 %, para disminuir después y permanecer en torno a un 3,0 % «hasta fines del horizonte de proyección, en esta ocasión el primer trimestre de 2014».
En relación con la tasa de política monetaria que en marzo se mantuvo en un 5,0 % anual, el informe señala que la misma «se ubica dentro de los rangos neutrales para la expansión de la economía».
El Ipom hace hincapié en que los riesgos externos aún son importantes, especialmente en «la periferia de la Eurozona», puesto que estas naciones «tienen altas necesidades de financiación este año y el próximo».
Matiza, no obstante, que Estados Unidos, gracias a sus indicadores más favorables de creación de empleo, producción industrial y expectativas, «compensa en parte las perspectivas más sombrías en la Eurozona».
El emisor mejoró además, desde 3,5 a 3,7 dólares por libra su previsión para el precio del cobre, el principal producto chileno, en 2012 y para 2013 vaticinó un precio de 3,6 dólares por libra, todo ello, explicado por la recuperación de la demanda en Estados Unidos y por las importaciones de China, «que continúan dinámicas a pesar de la desaceleración de ese país».
Sobre el tipo de cambio, el informe prevé que se situará en niveles similares a los actuales, de unos 485 pesos.
