Evitar el uso de taco alto e idealmente buscar un calzado blando y ancho, son las únicas formas de prevención de esta alteración hereditaria que afecta principalmente a mujeres. La solución más definitiva, solo considera la aplicación de cirugía.
Una dolencia capaz de generar gran incomodidad al caminar son los juanetes. Se trata de una protuberancia en el borde interior del dedo gordo del pie (Hallux), que deriva de una alteración hereditaria del esqueleto, por lo que sus formas de prevención son casi nulas.
Para ayudar a comprender qué complicaciones puede provocar la presencia de juanetes y señalar cuáles son sus tratamientos, el traumatólogo de Clínica Vespucio Dr. Miguel Ángel Balmaceda se refiere a las características de esta molesta enfermedad.
Esta deformidad se genera en la zona cercana a la punta del pie, “comúnmente perjudica al dedo gordo a través del primer hueso que lo afirma (Metatarsiano). Lo que ocurre es que este hueso se gira hacia el borde interior del pie, provocando una protuberancia que desvía el dedo hacia fuera”, explica.
El juanete (Hallus Valgus) es una dolencia que se presenta mayoritariamente en mujeres, “hablamos de una enfermedad que se asocia al cromosoma X que está dos veces en las mujeres. Además el tipo de calzado y uso de tacos favorece su formación”, detalla.
Los principales síntomas de la aparición de juanetes son:
-La piel del pie se vuelve callosa y enrojecida a lo largo del borde interno del dedo gordo.
-Presencia de una protuberancia ósea en ese sector.
-Los zapatos generan dolor en la articulación.
-El dedo gordo se inclina en dirección hacia los otros dedos.
Al hablar de juanetes nos referimos a una alteración que puede convertirse en una enfermedad cuando el dolor es capaz de perjudicar la vida cotidiana, “por ejemplo no poder encontrar el zapato adecuado. Usar un calzado blando, ancho y sin taco, puede sonar como la solución, pero no es lo definitivo ya que este no reducirá la deformidad”, comenta.
La radiografía de pie en su detección es un factor relevante para determinar las características del juanete.
El traumatólogo de Clínica Vespucio señala que existen variadas técnicas quirúrgicas para el tratamiento de Hallus Valgus o juanete, “básicamente la cirugía además de sacar la protuberancia ósea que provoca el dolor y la deformidad, consiste en reconducir el hueso Metatarsiano a la posición correcta, para que el dedo gordo vuelva a su lugar. Esta intervención dura alrededor de una hora y requiere que el paciente pase una noche en la clínica”, añade.
A juicio del Dr. Balmaceda, la parte más compleja de la recuperación tras la cirugía es la evolución de las partes blandas del pie, ya que esto puede tardar un tiempo cercano a los dos meses. “Al reparar el hueso, este demora tres a seis semanas en recuperarse, pero las zonas blandas del pie tardan más tiempo y ese período de recuperación complica a los pacientes que no pueden detener su actividad”, afirma.
Tras la operación, la indicación médica es realizar una marcha restringida en la casa durante las tres primeras semanas, en las que se puede apoyar de manera progresiva el pie con ayuda de un zapato post operatorio; “a partir de las tres semanas siguientes deberá usar zapatillas y volver a la caminata normal, pero con restricción de practicar deportes. Luego de las seis semanas, los pacientes pueden retomar el uso de calzado normal, con la posibilidad de usar taco bajo”, asegura.
