El otoño y sus bruscos cambios de temperatura marcan el inicio de algunas enfermedades respiratorias. Una de las más comunes, capaz de provocar gran malestar, es la faringitis, que se manifiesta por dolor de garganta y cuyo principal origen está relacionado a una infección viral.
Evitar exponerse a enfriamientos, consumir vitamina C y mantener la higiene de sus manos al contacto con enfermos, son parte de las recomendaciones para prevenir su aparición. Seguir las indicaciones médicas para tratar el agente que la originó, conforma el siguiente paso para recuperarse de sus molestos síntomas.
El otoño y sus bruscos cambios de temperatura marcan el inicio de algunas enfermedades respiratorias. Una de las más comunes, capaz de provocar gran malestar, es la faringitis, que se manifiesta por dolor de garganta y cuyo principal origen está relacionado a una infección viral.
Con la idea de aportar más datos acerca de esta frecuente dolencia, la coordinadora de otorrinolaringología de Clínica Vespucio, Dra. Isabel Carranza, se refiere a sus características y tratamientos.
Ubicada en la parte posterior de la boca, la faringe (garganta) se encuentra entre las amígdalas y la laringe. Al inflamarse se habla de faringitis la que, “en la mayoría de los casos, se genera por un virus como aquellos que provocan el rinovirus, adenovirus, la influenza o el resfrío común. Pese a ello, su origen también puede estar relacionado con alergias, bacterias o reflujo”, agrega la especialista.
El principal síntoma de la faringitis es el dolor y carraspera en la garganta que hace que tragar moleste. “Otras manifestaciones son tos, secreciones purulentas y la sensación de tener un cuerpo extraño en la zona, que deriva de la inflamación. “También se puede acompañar de fiebre”, detalla.
Capaz de afectar a niños y adultos, esta patología se contagia por vía respiratoria, entonces “una de las principales recomendaciones es no exponerse a personas enfermas, evitando los ambientes cerrados y hacinados, donde se pueden propagar con mayor facilidad los virus o bacterias que la producen”, señala la Dra. Carranza.
Según la otorrinolaringóloga de Clínica Vespucio, otras recomendaciones para prevenir su aparición son:
-Lave frecuentemente sus manos, en especial luego de sonarse o de haber estado en contacto con alguien con dolor de garganta.
-Evite ambientes hacinados
-Utilice pañuelos desechables y luego lave sus manos.
-Evite exponerse a enfriamientos.
-Consuma productos con vitamina C.
Si la faringitis es de tipo viral (causa más frecuente) esta “debe tratarse con antiinflamatorios y otros medicamentos recetados por el especialista que ayudarán a aliviar el dolor. Los síntomas deberían desaparecer gradualmente en una semana. Si la faringitis se causó por una bacteria, se deberá usar antibióticos los que harán efecto al cabo de dos a tres días luego de ingerirlos”, afirma.
