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Eje histórico de la Concertación se resiste a primarias para elegir a los aspirantes al Congreso A pesar de la buena convocatoria de la DC para elegir a su abanderado

Eje histórico de la Concertación se resiste a primarias para elegir a los aspirantes al Congreso

Claudia Rivas Arenas
Por : Claudia Rivas Arenas Periodista de El Mostrador @crivasa
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Si bien en el PPD insisten en que uno de los dos cupos por distrito debería definirse a través de este mecanismo participativo, tanto en el falangismo como en el PS tienen argumentos en contrario y a favor de la negociación. Aunque todo indica que la ciudadanía cada vez más aspira a que los partidos prefieran consultar en vez de imponer un candidato.


El pasado martes, mientras en la Sala de la Cámara Alta se debatía la habilitación de la reforma constitucional que modifica el binominal, el presidente del PPD, Jaime Quintana, se acercó a su par de la DC, Ignacio Walker, para manifestarle que, tras el positivo proceso de primarias vivido por el falangismo, “resulta incomprensible y también un retroceso seguir insistiendo en que se aplique el sistema de la negociación para elegir a los candidatos al Congreso”. Ello, porque se estima que la ciudadanía ha validado cada vez más el mecanismo de primarias para elegir a sus candidatos. Aun cuando en la DC y el PS sostienen que la convocatoria que consiguió el proceso democratacristiano para definir a su abanderado presidencial, si bien es valorable, no cambia en nada la posición ya establecida por estos partidos para escoger a sus candidatos en los comicios parlamentarios del 2013.

De hecho, en el socialismo aseguran que en la cita del lunes 21 de los secretarios generales, para avanzar en el acuerdo parlamentario, nadie abordó el tema. Por lo que todo sigue igual. Para el timonel del PPD “de todas maneras” el proceso organizado por la DC valida aún más el que los candidatos al Parlamento sean elegidos a través del mecanismo de primarias.

Esta tienda se la ha jugado por la fórmula desde el inicio de la negociación parlamentaria, pero ha encontrado la oposición del resto de las fuerzas del conglomerado. Quintana explica que, al inicio, su planteamiento fue el de “primarias a todo evento por los dos cupos” y que dada la negativa de sus aliados se optó por la posibilidad de que un partido que eligió diputado pueda “consensuar” el cupo, lo que no significa —aclara— que ‘el que tiene mantiene’; mientras que el segundo se resuelva a través de las primarias.

No obstante, añade el presidente del PPD, a ese mecanismo también se niegan quienes están por la alternativa de negociar todos los distritos, aludiendo particularmente a sus socios del PS y la DC.

Es cierto que la postura del PPD es resistida por sus aliados, algo que reconocen en el socialismo. Porque estiman que, si bien las primarias tienen aspectos positivos, como el hecho de que generan mayor transparencia en el proceso y legitimidad para el candidato electo, y también “es un gran mecanismo para evitar la división interna; no necesariamente sirve para elegir buenos candidatos”. Ello, porque algunas de sus externalidades negativas pueden resultar perniciosas para los pactos, en un proceso como el de la elección de los aspirantes al Congreso.

Esto, ya que “gana el que más acarrea”. De allí que, según una alta fuente del partido, el formato mal aplicado “puede destruir un partido completo, ya que por el efecto acarreo las minorías más activas pueden ganar las primarias, siendo igualmente poco representativas”. Y “mientras más chico el terreno a cubrir más relevancia cobra el acarreo”.

Más primarias, más expectativas

Por otra parte, en la tienda de Osvaldo Andrade se lamentan de que la postura del PPD los coloca en una difícil posición, pese a que son justamente el PS y la DC los partidos de la coalición opositora que “más primarias hemos hecho”. El punto es que el relativo éxito de los múltiples procesos que realizó la Concertación el año pasado, como las de abril para definir candidatos únicos de la oposición para los comicios municipales; o para elegir a los candidatos a concejales en enero; hasta la del presidenciable del falangismo, han generado una exigencia mayor de participación de parte de la ciudadanía, algo de lo que están conscientes los dirigentes de los partidos opositores. De allí que la fórmula de la elección de los aspirantes al Congreso genere expectativas y no sea de fácil solución.

[cita]En la tienda de Osvaldo Andrade se lamentan de que la postura del PPD los coloca en una difícil posición, pese a que son justamente el PS y la DC los partidos de la coalición opositora que “más primarias hemos hecho”. El punto es que el relativo éxito de los múltiples procesos que realizó la Concertación el año pasado, como las de abril para definir candidatos únicos de la oposición para los comicios municipales; o para elegir a los candidatos a concejales en enero; hasta la del presidenciable del falangismo, han generado una exigencia mayor de participación de parte de la ciudadanía, algo de lo que están conscientes los dirigentes de los partidos opositores. De allí que la fórmula de la elección de los aspirantes al Congreso genere expectativas y no sea de fácil solución.[/cita]

Pese a ello y por los argumentos antes expuestos, en el mundo socialista descartan que el efecto automático de las primarias DC sea apostar por utilizar ese mecanismo para definir a los aspirantes del Parlamento. Más aún, en la tienda advierten que “el PPD no tiene autoridad moral para decir que nosotros no queremos hacer primarias, porque los dos partidos que más primarias han organizado son justamente la Democracia Cristiana y el Partido Socialista”. Y pese a que Quintana lo ha negado, en el PS sostienen que el PPD es aún más conservador, porque plantea que ‘el que tiene mantiene’ su cupo y sólo el segundo a primarias”. Y explican que tras el proceso del sábado 19 en el falangismo “no hubo ningún cambio de opinión”, en la cita del lunes 21 y que es altamente probable que la DC y el PS “seamos los partidos que más primarias hagamos” con miras a las parlamentarias.

Aunque el secretario general del PPD, Gonzalo Navarrete, coincide con Quintana en que la convocatoria de la DC “debería incidir” en que la tienda cambiara de opinión respecto a la fórmula para elegir a los aspirantes al Congreso a nivel de coalición, está consciente de que resolvió, en la última Junta Nacional, que definirá a sus candidatos en primarias internas y, posteriormente, por negociación. De ahí que, a su juicio, “lo principal es que el Servel aclare el tema de que hay que hacer primarias por los dos cupos”.

Ello, porque según explica, hay distritos en los que hay candidatos sin retador, por lo que no tendría sentido utilizar el mecanismo sí o sí, como ha interpretado la ley el Servicio Electoral. En su opinión, si el organismo reconsidera su postura “cambia totalmente el sentido de la negociación”.

De allí que le enviaran una carta al servicio en que junto con expresar la preocupación del PPD por su postura, solicita la reconsideración, ya que según uno de los varios argumentos expuestos en la misiva “no cabe duda que el espíritu y sentido de la ley de primarias ha sido que facultativamente los partidos políticos o pactos electorales puedan decidir qué cargos llevar al proceso de primarias, pudiendo en consecuencia en el caso de las candidaturas parlamentarias llevarse a primarias sólo uno de los candidatos, en tal sentido es perfectamente aplicable a la interpretación de la norma lo dispuesto en el artículo 19 inciso segundo del Código Civil, que establece como regla de interpretación de la ley lo siguiente: ‘Pero bien se puede, para interpretar una expresión obscura de la ley, recurrir a su intención o espíritu, claramente manifestados en ella misma, o en la historia fidedigna de su establecimiento”.

Diseño DC invariable

En todo caso, la Democracia Cristiana hace una interpretación similar a la del Servel en relación con la implementación de las primarias. En este sentido, el secretario nacional del partido, Víctor Maldonado, afirma que basados en la legislación vigente “legalmente no es posible lo que plantea el PPD”. El dirigente falangista argumenta que, “según la ley, las únicas primarias que pueden existir son las del 30 de junio”, aludiendo a las presidenciales, para determinar al candidato presidencial tanto de la oposición como del oficialismo. Y, en la misma que sus socios del PS, Maldonado advierte que “nosotros no vamos a cambiar nuestro diseño: definir los cupos, llenar con los nombres y definir en primarias internas, el 24 de marzo, donde haya más de un candidato”. Nada en este esquema contempla una primaria a nivel de la Concertación. Eso para cumplir “con el objetivo de proyectar al candidato presidencial y aumentar en número de parlamentarios y para eso necesitamos más tiempo para competir, proyectarnos”. Y una primaria adicional complicaría todo este proceso.

Adicionalmente, porque el aumentar el número de parlamentarios es una prioridad para la DC y necesita que sus aspirantes inicien sus respectivas campañas lo antes posible y que “estén desplegados antes de que Bachelet llegue” a Chile, preferentemente con la foto del abanderado falangista. Aún cuando Maldonado desdramatiza la posibilidad cierta de que muchos de los aspirantes al Parlamento se tomen la foto con la ex Presidenta Michelle Bachelet. Ello, porque para el dirigente “el candidato a parlamentario tiene que proyectarse él para ganar. Esa es su obligación. No consideramos que sea un problema, salvo que nosotros lo provoquemos. Por otro lado, creo que muchos (candidatos) van a optar por salir con la foto de ambos (Bachelet y Claudio Orrego)”.

Mientras que el jefe de la bancada de senadores de la DC, quien además asumiría la presidencia del Senado el próximo año, en virtud del acuerdo al inicio del actual periodo presidencial, Jorge Pizarro, estima que la convocatoria que logró su partido en las pasadas primarias “no cambia nada. La negociación la llevan los partidos y en ella ya se acordaron tres ejes: primaria presidencial, propuesta programática y lista parlamentaria única que respalde el programa de gobierno”. Por lo que el escenario postprimaria presidencial “no cambia en nada la postura parlamentaria de la DC”. De hecho, al interior de la tienda de Alameda #1460 se toman con cautela las cifras que tanto han impactado. Un observador que ha seguido todos los procesos internos de la Democracia Cristiana advierte que en la primaria para concejales votaron alrededor de 71 mil personas y que la participación de 56 mil personas en el proceso para elegir al aspirante presidencial se celebra sólo “porque se esperaba que votara mucho menos gente”.

Como sea, no parece que el eje histórico de la Concertación esté dispuesto a ceder a la propuesta del PPD. Incluso se comenta que en la cita de los presidentes de los partidos el miércoles 23, en las dependencias del Senado en Valparaíso, se intentó cerrar el debate por la fórmula de nominación de candidatos y dejarlo sólo en negociación, aunque no se avanzó en ello. En el Partido Radical, que ha mantenido una posición más cercana al eje PS-DC que al PPD en esta pasada, aclaran que estos últimos nunca plantearon primarias a todo evento. Sin embargo, el timonel de la tienda y precandidato presidencial, senador José Antonio Gómez, explicó que lo que su partido ha planteado —más allá del debate por las primarias— es que se puedan llevar a gente nueva en las listas de la oposición. Para Gómez es imprescindible “dejar que participen en las primarias personas como Giorgio Jackson y otros que no quieren que les den los cupos, sino competir por ellos en las primarias”.

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