Organizadores calcularon en 80 mil los asistentes
«Es una marcha muy cercana a los 40 años del golpe, que no sólo marcó la detención y desaparición de miles de chilenos, sino que también marcó la implantación de un modelo que hasta el día de hoy evidencia la segregación e injusticia que ha vivido», dijo el presidente de la FEUC, Diego Vela.
La próxima conmemoración de los 40 años del Golpe Militar del 11 de septiembre de 1973 marcó este jueves el tenor de los discursos de los dirigentes del movimiento estudiantil, que llevó a cabo una nueva y masiva marcha para insistir en sus demandas para cambiar el modelo político y educacional.
Según los representantes de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) y de las organizaciones de estudiantes secundarios, fueron alrededor de 80 mil las personas que se sumaron a la manifestación que partió en el sector de Plaza Italia, avanzó en completa normalidad por la Alameda y enfiló por el norte por la calle Mac Iver, a un costado de la Biblioteca Nacional, para desembocar en al calle general Mackenna y terminar frente a un escenario emplazado en las inmediaciones de la Estación Mapocho, donde se llevó a cabo un acto cultural.
«Es una marcha muy cercana a los 40 años del golpe, que no sólo marcó la detención y desaparición de miles de chilenos, sino que también marcó la implantación de un modelo que hasta el día de hoy evidencia la segregación e injustcia que ha vivido», dijo el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Diego Vela, al término de la actividad, que terminó sin embargo con incidentes protagonizados por grupos de encapuchados que, al margen de la convocatoria general, se enfrentaron con efectivos de Fuerzas Especiales de Carabineros.
Sobre esto último se refirió Vela más tarde, en una conferencia de prensa donde se entregó un balance de la marcha, oportunidad en la que si bien resaltó la coordinación previa que se hizo con la policía uniformada para garantizar el desarrollo de la marcha, dijo que los efectivos no respetaron un acuerdo previo para aislar a los encapuchados y evitar que, como ocurrió, la acción de los carros lanzaaguas afectaran a quienes se manifestaban pacíficamente.
En tanto, el vocero de la Confederación Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), Moisés Paredes, manifestó que lo importante de esta marcha, es recordarle a la ciudadanía que «somos los herederos de quienes hace 43 años creyeron en un país mejor» y reiteró la necesidad de modificar el modelo.
Agregó que la ciudadanía debe salir a la calle a manifestarse no sólo para mejorar la educación. «Hay que comprender que la lucha que estamos levantando hoy en día los estudiantes no es sólo de los estudiantes, porque es necesario posicionar temas como las demandas del mundo del trabajo, como las demandas del mundo de la salud».
Y agregó que «es necesario salir a organizarse y a reconstruir el tejido social que la dictadura nos destruyó y los primeros gobiernos de la Concertación también contribuyeron a eso».
