«En mi cuerpo no tengo ni siquiera una esquirla de bala», sostuvo Juan Aliste.
Los imputados del crimen del cabo Luis Moyano -Juan Aliste, Marcelo Villarroel y Freddy Fuentevilla- aseguraron tener «pruebas científicas» de su inocencia.
«Hay más de 80 pruebas de ADN y ninguna de esa pruebas de ADN es vinculante ni conmigo, ni con Marcelo, ni con Freddy. No tengo ninguna relación científica con la sangre que se encontró en el sitio del suceso», sostuvo Juan Aliste en entrevista con Radio Cooperativa.
«En las declaraciones del carabinero de apellido Abarca señala contundente y categóricamente que me dispara en varias oportunidades y que certeramente me da al menos en dos oportunidades. Contamos hoy, como defensa de elementos fundamentales, que indican que yo en mi cuerpo no tengo ni siquiera una esquirla de bala».
Por su parte, Villarroel acotó que «somos los perfectos culpables para el Estado. No es casual. Con el fallecido general director de Carabineros José Bernales tuvimos una relación circunstancial desde que teníamos 16 ó 17 años, cuando él fue miembro de la Dipolcar. El equipo a cargo de ese entonces, que eran capitanes y tenientes de la Dipolcar, son hoy el alto mando de Carabineros. No es nada casual».
En tanto, Fuentevilla puso énfasis en que «las primeras líneas investigativas de la Fiscalía Militar no daban cuenta de nosotros, apuntaban a otros sectores que tenían que ver con el narcotráfico. Es raro que de un momento a otro aparezca todo su caso resuelto».
«No planteo el terror como alternativa de lucha (…) a quienes plantean que podemos ser fuimos o seremos terroristas, es la convicción de ellos. Que combatamos la sociedad de clases les provocará terror», concluyó.
El 18 de octubre de 2007 fue asesinado el cabo Luis Moyano, quien intentó repeler el asalto a la sede Agustinas del Banco Security, en el centro de Santiago. Se responsabilizó del crimen a los ex integrantes del Movimiento Juvenil Lautaro: Juan Aliste, Marcelo Villarroel y Freddy Fuentevilla.
