Hizo hincapié en que juez fue minoría en fallo que rechazó indemnizar a afectados
«La salida de las Fuerzas Armadas en término de fuerzas de orden público se evaluó y se tomó la decisión cuando se estimó pertinente», dijo el ex ministro de Defensa, quien dejó claro que respetaba pero no compartía el voto disidente del magistrado y nuevo presidente de la Corte Suprema a partir del 6 de enero.
El ex vocero de La Moneda y también ex ministro de Defensa durante el gobierno de Michelle Bachelet, Francisco Vidal, salió al paso de los cuestionamientos a las decisiones que tomó tras el terremoto y tsunami del 27-F la actual Presidenta electa.
Lo anterior luego del fallo de la Tercera Sala de la Corte Suprema que, si bien rechazó la indemnización que solicitaban los pequeños comerciantes del Bío Bío que sufrieron el saqueo de sus locales, contó con el voto de minoría del juez Sergio Muñoz, quien asumirá el próximo 6 de enero como nuevo presidente del máximo tribunal.
En su argumentación, el magistrado sostuvo que tras la catástrofe «la autoridad civil tenía el deber de adoptar de manera inmediata el máximo de medidas extraordinarias a fin de superar los efectos de esos hechos excepcionales, para lo cual debía hacer uso de sus facultades de dirección y coordinación de los servicios públicos, como, además, ciertamente tener presente la posible comisión de hechos delictuales, de lo que surge inmediatamente un deber de protección de la población y de prevención de tales ilicitudes”. Y concluyó que, a la luz de los hechos, «resulta ineludible concluir que en la especie hubo incumplimiento de los deberes de servicio contenidos en la ley».
Pero Vidal, en declaraciones consignadas por Emol, hizo hincapié en que la posición del juez fue minoritaria y que se impuso la posición de los otros miembros de la sala.
«Él está en todo su derecho como juez integrante de una sala del tribunal superior, segundo es un voto de minoría, tercero el está fallando como ministro de ese tribunal y no como Presidente de la Corte Suprema», dijo, agregando que luego de leer el fallo, queda claro que la de Muñoz es una opinión jurídica «minoritaria dentro de la sala que falló este tema. Es respetable obviamente, pero el gobierno de la época del cual yo formé parte tiene otra opinión».
En ese sentido afirmó que la decisión de enviar fuerzas militares a la Octava Región para restablecer el orden se tomó, a su juicio, cuando se estimó «pertinente» y puso énfasis en que Bachelet y su gobierno cumplieron «con todos los deberes».
«La salida de las Fuerzas Armadas en término de fuerzas de orden público se evaluó y se tomó la decisión cuando se estimó pertinente», dijo.
