“No existe ningún riesgo. Ninguna correlación entre autismo, enfermedades neurológicas y vacunación», dijo la integrante de la Comisión de Salud de la Cámara, en compañía del titular del Minsal, Jaime Mañalich.
Hasta el Consultorio Bicentenario de Renca llegó esta mañana la diputada Karla Rubilar (Amplitud) con su pequeño hijo Rubén de un año y medio de edad, donde junto al ministro de Salud, Jaime Mañalich, procedieron a vacunarlo con una dosis que contenía el cuestionado componente “Timerosal”.
Lo anterior, con el fin de despejar dudas respecto de las complicaciones que podría traer este componente en los menores que son vacunados en los consultorios del país, además de respaldar al Gobierno en el envío del veto presidencial a la ley que prohíbe su uso.
“No existe ningún riesgo. Ninguna correlación entre autismo, enfermedades neurológicas y vacunación”, dijo la legisladora que integra la Comisión de Salud de la Cámara, Karla Rubilar (Amplitud).
“La verdad es que como médico –con formación en salud pública–, como diputada, como madre y hermana de un joven autista (…) quiero transmitirles que con la vacunación de mi hijo –que además es ahijado del ministro de Salud– no hay ningún riesgo con las vacunas que se reciben en los consultorios”, agregó.
Asimismo, enfatizó que «el llamado es claro y categórico: el vacunar es un acto de amor y que nadie deje de vacunar a sus hijos, porque, al dejar de hacerlo, los están poniendo en riesgo”.
En relación a la alarma pública que han causado algunos dichos respecto de las consecuencias negativas de suministrar vacunas con timerosal, la parlamentaria fue clara: “Hemos visto que la gente tiene temor; que está preguntando cuál es la verdad… La verdad es que todavía nuestro sistema es confiable. No ha disminuido la vacunación, pero sabemos que si se siguen diciendo cosas que son falsas eso podría ocurrir y ahí correrían grave riesgo nuestros niños y nuestra salud”.
Finalmente, la diputada de Amplitud reiteró el llamado, tal como lo hizo el Presidente Piñera junto a las Sociedades Científicas el viernes recién pasado.
“No hay ningún riesgo en vacunar a los niños, pero sí hay un tremendo riesgo si es que los papás dejan de vacunar a sus hijos. Así que el llamado es a venir con confianza, las vacunas salvan vidas”, concluyó.
