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Eyzaguirre: «Libertad de enseñanza no es lo mismo que el emprendimiento económico» Ministro interviene por primera vez en comisión de Educación de la Cámara Baja

Eyzaguirre: «Libertad de enseñanza no es lo mismo que el emprendimiento económico»

«Lo que el mundo desarrollado ha establecido casi de manera consensual es que proveer educación a través de la obtención del lucro, que es muy importante en todas las otras áreas de la economía, no es un buen esquema», precisó el ministro. Por tanto, fin al lucro, fin al financiamiento compartido y fin a la selección de los alumnos en los establecimientos serán los tres proyectos de ley que primero ingresará al Congreso el gobierno de Michelle Bachelet en el marco de su reforma educacional.


Este martes, en su primera intervención ante la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, el ministro Nicolás Eyzaguirre aclaró los principales puntos de la propuesta de reforma educacional del gobierno de Michelle Bachelet y respondió a las dudas más importantes de los miembros de la instancia. En esta línea, anunció que el fin al lucro, el fin al financiamiento compartido y el fin a la selección de alumnos en los establecimientos serán los primeros tres proyectos que ingresarán al Congreso. «Ni lucro, ni copago ni selección para la entrada son elementos que contribuyan a una educación equitativa», aseguró.

En tanto, sobre el proyecto de desmunicipalización, indicó que «dadas las señales que la Presidenta ha entregado respecto del proyecto de desmunicipalización y la creación de un Servicio Nacional de Educación, como servicios locales, son fundamentales para lograr una buena educación. Esto no es una fábrica de robots, no es una fábrica de salchichas».

El ministro se refirió a la necesidad de marcar las diferencias entre la libertad de enseñanza y lo que él definió como la «libertad de emprendimiento o proveer educación a través de la obtención del lucro». Al respecto, aseguró que el actual gobierno va «a proteger absolutamente la libertad de enseñanza (que) es completamente necesaria, lo que no es lo mismo que el emprendimiento económico para obtener ganancias por la enseñanza. Son cosas completamente distintas, una es una libertad civil, la otra es una libertad económica y lo que el mundo desarrollado ha establecido casi de manera consensual es que en la educación la libertad de emprendimiento o proveer educación a través de la obtención del lucro, que es muy importante en todas las otras áreas de la economía, no es un buen esquema», puntualizó. Y, a continuación, citó como ejemplo el caso de Estados Unidos, donde «existen apenas unas pocas universidades con fines de lucro que los informes de la Cámara de Diputados han votado que hay que cerrarlas por lo malas».

En otro tema relevante, sobre lo que será el financiamiento de la educación pública de calidad, el ministro habló de un sistema mixto. «El costo de entregar educación de calidad varía en función de un conjunto de circunstancias. Si me voy a la esquina de sólo considerar el subsidio a la demanda por matrícula o por asistencia estoy diciendo que en la educación solamente hay costos variables que varían con el número de estudiantes. Eso no es correcto», precisó. A ello, agregó que la educación cuenta además con costos fijos que no dependen de lo anterior, sino «del comportamiento sociocultural del estudiante, de la región, de la lejanía, de un conjunto de otras cosas y, por tanto, lo correcto sería tratar de hacer lo más complejo que combine elementos de subsidio basal con lo que tenga que ver con la cantidad de alumnos que están recibiendo el servicio educativo. En eso estamos trabajando».

Además, Eyzaguirre habló de la posibilidad de rescatar y mantener proyectos educativos que propongan alternativas en materia pluricultural y pluriconfesional y que sean suplementarios a la oferta que garantiza el Estado.

«Nos parece que el que las familias puedan escoger además de una educación pública una educación que respete la particularidad del sistema de creencias de la familia es fundamental, forma parte de nuestra Constitución. Por tanto, aunque no es el modelo típico de todos los países, nosotros creemos que continuar con una educación particular subvencionada que le permita a la familia elegir ese tipo de proyecto educativo, suplementarios a aquellos productos educativos que constituyen nuestra esencia como nación, que tendrán que ser entregados por la educación pública, si además de eso tiene elementos confesionales, culturales especiales, en la medida que sean compatibles con aquellos sistemas de creencias que tenemos como país, obviamente tendrá que seguir adelante y sobre la base de un campo de juego nivelado no habrá nada en contra de aquello», aseguró.

Según el ministro, la necesidad de esta preservación de proyectos educativos alternativos que contribuyan en este sentido tiene que ver con que «hemos tenido unas reglas del juego que favorecen a la (educación) particular subvencionada. Las familias han ido a la particular subvencionada no a buscar proyectos educativos distintos, sino estrato, calidad, seguridad, porque hemos desgraciadamente amarrado las manos de nuestra educación pública de tal forma que están los que están, eso es lo que pretendemos nosotros desatar», concluyó.

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