El ex timonel del PS salió al paso de las declaraciones de la ministra de Salud calificándolas como “inconducentes”.
El ex presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona, calificó como “inconducentes” las declaraciones de la ministra de Salud, Helia Molina, quien dijo en una entrevista, el día sábado, que ni los curas ni los de la UDI se hacen cargo de los bebés en casos de violación.
“No me hago parte de la aguda polémica que ha habido por estos días con la Iglesia Católica. Por el contrario, soy muy franco en esto, pienso que tiene que buscarse un camino de diálogo. Hay que cerrar esta polémica, porque la Iglesia Católica es una fuerza amiga con el esfuerzo que tiene que hacer el país contra la desigualdad, independientemente de lo que se pueda decir, que hay denuncias en estos días por irregularidades en inscripciones de niños durante los años 80 y por el tema de la pedofilia también”, sostuvo el presidente del Instituto Igualdad en entrevista con Canal 13.
“Yo quiero decirlo con mucha franqueza, por respeto a mi tradición familiar y por cariño a mi esposa –me casé por la Iglesia Católica, pero yo soy agnóstico– no es un tema de opción religiosa. Yo pienso que los vínculos, las relaciones tienen que ser constructivas. Una cosa es debatir con altura de miras en relación al tema de la propuesta del aborto terapéutico y otra cosa es la descalificación enteramente inconducente en mi opinión», agregó el ex senador PS.
«Se ha descalificado, sobre todo con la frase de la ministra de Salud que señala que ‘es la responsabilidad de la madre y no de los curas’ cuando se produce la desgracia de un embarazo no deseado y que este finalmente termina en una criatura, y es responsabilidad de una mujer hacerse cargo de ella sin que tenga ninguna ayuda. Pienso en los enormes esfuerzos que hacen los curas a lo largo y ancho de todo el país en la lucha contra la extrema pobreza y la indigencia, esas palabras no sirven», insistió Escalona.
Consultado por su tesis de un ambiente ‘crispado’, aseguró que “se han extendido demasiado los temas, de manera que todos ellos en su conjunto han generado un clima de fuerte controversia. No se puede excluir la responsabilidad de ninguno de los actores. Sería eso mirar las cosas en blanco y negro, y eso no corresponde”.
De igual modo, hizo hincapié frente a las reformas tributaria y educacional, que «no se pueden resolver todos los temas al mismo tiempo, eso es imposible. La agenda tiene demasiados temas y no se pueden abarcar todos y desgraciadamente nos desenfocamos del eje por el cual fue construido el programa presidencial, que es encarar decididamente la desigualdad imperante en nuestro país. Nos empezamos a desplazar de ese foco que nos permitió agrupar a la mayoría de chilenos y chilenas, la que puede erosionar la base de sustentación del propio gobierno. Se está abarcando temas que van mucho más allá de las posibilidades ciertas de que esos se puedan resolver de manera constructiva y ser coronados finalmente con proyectos legislativos que sean aprobados en el Congreso Nacional con una mayoría suficiente».
Sobre el ambiente al interior de la Nueva Mayoría, Escalona lamentó que “haya personas que no la saben cuidar, que tienden a subvalorar y menoscabar la presencia de algunos actores. Especialmente un cierto prurito de voluntarismo de la izquierda que tiende constantemente a estar hostigando a la DC. Esa actitud, esa mirada, pierde de vista que esta construcción es de una amplitud muy grande que garantiza la viabilidad del proceso de reformas. Ningún actor de la Nueva Mayoría puede ser menoscabado y todos ellos son indispensables. Nosotros perderíamos la mayoría, como ya la perdimos el año 2006 y 2007, si no somos capaces de actuar con la amplitud que se necesita”.
