La piedra de tope es el mecanismo para lograr esta reforma
La mandataria se abrió a la posibilidad de que se concreten compromisos entre las distintas fuerzas políticas para avanzar en los cambios que su gobierno está promoviendo, ya que «me parece fundamental para el bienestar de nuestro país: es la capacidad de construir acuerdos sólidos, con los cuales nos podemos hacer cargo de los desafíos y las grandes deudas que tenemos como país».
La Presidenta Michelle Bachelet abrió la posibilidad de que se concreten acuerdos entre las distintas fuerzas políticas para avanzar en las reformas que su gobierno promueve y sobre una nueva Constitución, señaló que seguirá en este camino o, al menos, redactar una nueva e iniciar su discusión.
Así lo dio a conocer el viernes al realizar un repaso sobre el estado de avance de las tres reformas que su gobierno se comprometió a realizar: la tributaria, la educacional y la constitucional.
La mandatario dijo que «buscamos transformar el sistema de educación, cambiar el régimen tributario y esperamos avanzar en una nueva Constitución. Al menos, redactar una nueva Constitución e iniciar su discusión».
De acuerdo a lo que señala El Mercurio, el mensaje contrasta con el que efectuó el pasado 21 de mayo ante el Congreso Pleno cuando anunció que «llevaremos a cabo una profunda reforma educacional, que será financiada por una reforma tributaria, las que unidas a una nueva Constitución, completan las tres grandes transformaciones que llevaremos a cabo en este periodo».
De esta forma, tanto la reforma educacional como la tributaria ya iniciaron su discusión en el Congreso, a través de distintos proyectos que fueron ingresados, pero en el caso de la nueva Carta Magna ha tenido distintos momentos en cuanto a un plazo para su despacho al Parlamento.
La jefa de Estado dijo en un comienzo que el debate constitucional se daría a partir del segundo semestre de este año.
En octubre de 2013 había expresado que «los dos proyectos grandes que van a ingresar es el de reforma educacional y el de reforma tributaria. Necesitamos recursos para poder iniciar lo antes posible los cambios que la educación en Chile quiere. Y digamos, el segundo semestre ingresará el proyecto de nueva Constitución».
A pesar de que se había comprometido a despachar el proyecto sobre una nueva Carta Fundamental durante el segundo semestre de este año, este se trasladó para el próximo año, de acuerdo a lo que confirmó la propia Presidenta en mayo pasado.
El debate sobre una nueva Constitución se ha centrado en el mecanismo necesario para poder realizar esta reforma, lo cual una parte de la Nueva Mayoría aboga por una asamblea constituyente.
Sin embargo, en este punto existen discrepancias, ya que hay quienes expresan que la discusión se debe hacer a través de la vía institucional, ya que es el Congreso en donde recae el poder constituyente.
Además, la mandataria también se abrió a la posibilidad de que se concreten acuerdos entre las distintas fuerzas políticas para avanzar en las reformas estructurales que su gobierno está promoviendo.
En ese sentido, precisó que «me parece que gana la política, la buena política, como me gusta decir a mí, porque hoy confirmamos algo que me parece fundamental para el bienestar de nuestro país: es la capacidad de construir acuerdos sólidos, con los cuales nos podemos hacer cargo de los desafíos y las grandes deudas que tenemos como país».
Añadió que los cambios no son sencillos, pero «sabemos, al mismo tiempo, que los chilenos y chilenas no quieren seguir esperando. Los desafíos son claros y es posible abordarlos, con nuestras legítimas diferencias. Tenemos opiniones distintas sobre muchas cosas en nuestro país, y eso no es malo, y con el mismo sentido de responsabilidad que ha caracterizado nuestra reciente historia democrática».
