Desliza crítica a Kast y a «parlamentarios con 99% de financiamiento no transparentado»
Salió al paso de los cuestionamientos por un aporte reservado hecho a su campaña por la esposa de Max Marambio, ex dueño de la Universidad Arcis. El diputado aclaró que el tema fue transparentado e incluso aseguró que le escribieron al Servel «diciéndole que no queríamos recibir ningún tipo de aporte reservado y nos respondieron diciendo que no era posible para ellos, bajo la legislación actual, rechazarlos».
El diputado de Revolución Democrática, Giorgio Jackson, salió esta tarde al paso de los cuestionamientos en su contra que hablaban de un supuesto aporte reservado hecho a su campaña electoral por parte de Esperanza Cueto, la esposa de Max Marambio –ex dueño de la Universidad Arcis–, y señaló que se habían transparentado en su minuto a través del sitio web de su entonces candidatura. «La ley te exige que tres meses antes del día de votación tú transparentes ese financiamiento y nosotros decidimos transparentarlo desde marzo. Y además cuando íbamos a comenzar la campaña le escribimos una carta al Servel diciéndole que no queríamos recibir ningún tipo de aporte reservado y nos respondieron diciendo que no era posible para ellos, bajo la legislación actual, rechazar los aportes reservados. Por lo tanto, después en octubre nos llegó una donación reservada y dijimos ‘la vamos a ir a devolver, preguntémosles antes a nuestros donantes si se habrán equivocado y la habrán mandado al Servel'», explicó el parlamentario en un punto de prensa.
Cueto, con quien Jackson había «trabajado y coincidido en varios temas de igualdad de género», no habría tenido problema en transparentar su donación. «Finalmente la transparentamos y por el hecho mismo de transparentarlo dejó de ser reservado», aclaró el parlamentario, agregando que precisamente «la característica de una donación reservada es que no se conoce y nosotros sí la transparentamos, está en nuestra página web y, por lo mismo, la gente pudo saber que ella nos donó».
En lo que respecta a Marambio, precisó que habría hecho dos aportes: uno a través de una subasta de obras de arte, y el otro, mediante una donación.
Consultado sobre algún eventual conflicto de interés por la donación de Cueto y su vínculo con Marambio, quien estuvo vinculado a la cuestionada universidad que hasta hace poco estaba controlada por el Partido Comunista, Jackson aclaró que la mujer «no sólo tiene su patrimonio, ella tiene su personalidad y trabaja por el tema de la igualdad de género» y enfatizó que «no podemos ser machistas de vincularlo todo el rato a las acciones que tenga su marido».
Asimismo, aprovechó para deslizar críticas a sus pares en la Cámara cuyas candidaturas fueron contundentemente financiadas vía aportes reservados, recursos que jamás se transparentaron. Uno de ellos es, nada más y nada menos, que el diputado con quien comparte distrito, Felipe Kast, de Evópoli. Y es que la semana pasada fue liberado un listado con el detalle de los recursos de este tipo recibidos por los actuales miembros de la Cámara de Diputados. La nómina estuvo encabezada por el timonel de la UDI Ernesto Silva, seguido por el líder de Evópoli, Felipe Kast, quien reunió casi $218 millones en calidad de aportes reservados.
En esa línea, Jackson dijo sentirse molesto por los cuestionamientos, ya que «en el fondo nosotros nos tiramos a la piscina al minuto en que decidimos transparentar todo desde el comienzo, desde el 11 de marzo, todos nuestros recursos». Por el contrario, recalcó, «hay otros parlamentarios que el 99% de su financiamiento nosotros no sabemos de dónde viene, que son sumas mucho más cuantiosas y la verdad es que acá no quiero convencer a nadie, la gente me cree o no me cree, todos los datos están disponibles».
Por último, descartó, una vez más, que su rechazo a la comisión investigadora de la Universidad Arcis estuviera relacionada con algún conflicto de interés, recordando que «las razones por las cuales encontrábamos que la comisión que pretendía nuevamente investigar el tema del lucro en las universidades no tenía ningún asidero y era redundante»
«Creemos que la Universidad Arcis tiene que ser intervenida y por eso es que queremos que salga el interventor provisional, porque debe ser rescatada (…). Nosotros creemos que es hora de legislar, no de seguir haciendo comisiones investigadoras», concluyó el parlamentario.
