La decisión se produce poco más de un mes después de las declaraciones que formuló el ex timonel de la ANFP sobre el escándalo de los sobornos al interior de la Conmebol y la Concacaf que salieron a la luz tras una investigación que lleva adelante en EE.UU. el FBI.
En un breve comunicado subido a su página web, la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) comunicó la decisión de la Comisión de Ética del organismo de sancionar a Harold Mayne-Nicholls, ex presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) y miembro del grupo de evaluación de las candidaturas de los Mundiales 2018 y 2022, con la prohibición de participar, dentro de los próximos siete años, en toda actividad relacionada con el fútbol, tanto de carácter nacional como internacional.
La FIFA señaló que el órgano de decisión de la citada comisión es presidido por Hans-Joachim Eckert, y que la sanción se determinó durante una sesión «en presencia del acusado y el presidente del órgano de instrucción de la Comisión de Ética de la FIFA, Cornel Borbély».
La Federación, eso sí, se excusó de entregar mayores detalles del asunto amparándose en el artículo 36 de su Código de Ética, que obliga a «miembros de la Comisión de Ética, empleados y secretarias», a «guardar secreto sobre toda información de la que hayan tenido conocimiento durante el ejercicio de sus funciones; en particular, sobre los hechos juzgados, el contenido de las investigaciones y deliberaciones y las decisiones adoptadas, así como sobre los datos personales privados en cumplimiento del Reglamento de Protección de Datos de la FIFA».
EL citado artículo 36 también establece que «únicamente podrán hacerse públicas las decisiones finales sobre el procedimiento ya notificadas a las partes implicadas» y que «en caso de incumplimiento del presente artículo por parte de un miembro de la Comisión de Ética, la Comisión Disciplinaria de la FIFA suspenderá a dicho miembro hasta el siguiente Congreso de la FIFA».
A fines de mayo de este año, Mayne-Nicholls se refirió al escándalo de sobornos en la FIFA que investiga en Estados Unidos el FBI, y que gatilló la renuncia del presidente de la FIFA Joseph Blatter. «Lo que he leído es que la investigación es por comisiones ilícitas recibidas por dirigentes de Conmebol y Concacaf respecto de derechos de Copa América y la Copa Centenario», dijo el dirigente a Chilevisión el día 28 de ese mes, oportunidad en la que relató que en 2010 se negó a firmar, en su calidad de presidente de la ANFP, una oferta de Full Play para comprar los derechos de la Copa América, misma que posteriormente, dijo, suscribió el actual presidente de la ANFP, Sergio Jadue. «Hicieron buena oferta y suscribieron contrato con otras federaciones. Yo me negué a firmarlo porque pensé que nos iba a traer problemas».
Y sobre si Jadue, una vez conocidas las acusaciones del pago de sobornos en la Conmebol debió haber dado un paso al costado, Mayne-Nicholls dijo que «me es difícil ponerme en posición de una persona de la que discrepo en tantas cosas. Si yo hubiera aparecido en listado del FBI habría hecho lo imposible por demostrar que hay un error y para eso debo dar un paso al costado al menos momentáneamente o pedir permiso al consejo para demostrar mi inocencia. Pero yo no puedo decir que eso mismo lo hará otra persona con la que discrepo en tantos conceptos de vida».
El ex presidente de la ANFP se refirió a la sanción en su cuenta de Twitter, asegurando que apelará.
