La cartera detectó que los sueldos del directorio del ente rector del fútbol chileno eran ilegales. Por ello fueron hasta Quilín, sin embargo allí les cerraron las puertas. La asociación arriesga perder la personalidad jurídica.
Un fiscalizador y dos contadores auditores del Ministerio de Justicia concurrieron hasta las dependencias de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) tres días después que Sergio Jadue renunciará y viajará a Estados Unidos con el fin de enfrentar la justicia norteamericana, en el marco del caso de corrupción de la FIFA.
Llegaron hasta Quilín por orden del jefe del Departamento de Personas Jurídicas de la cartera, Carlos Aguilar, previa instrucción de la ministra Javiera Blanco, según consigna hoy La Tercera.
En la ocasión, solicitaron la documentación contable del organismo. Sin embargo, no se les permitió conocer los antecedentes solicitados.
La cartera detectó a comienzos de septiembre que los sueldos del directorio eran ilegales, por cuanto no correspondían por tratarse de una corporación jurídica.
Tema que está siendo investigado por el persecutor Felipe Sepúlveda de la Fiscalía de Peñalolén.
No obstante, la ANFP presentó un recurso ante el ministerio señalando que “en la última modificación de estatutos aprobada por los socios de la corporación, determinamos que los cargos del directorio son remunerados”.
El Ministerio de Justicia rápidamente contestaron que la corporación se rige por el Código Civil y, por ende, no estaría permitido que los miembros de los directorios reciban un sueldo.
Se espera que a mediados del próximo mes la ministra Blanco tome una decisión. De no acceder la ANFP a dejar sin efecto los contratos de los directores, restituir el dinero y determinar quién instruyó el pago de estos dineros, arriesga a que Justicia solicite a través del Consejo de Defensa del Estado (CDE) que se le quite la personalidad jurídica.
