Junto al senador de la DC Ignacio Walker
En medio de los cuestionamientos por el financiamiento de la minera no metálica al PPD, mientras la alcaldesa de Santiago era presidenta del partido, más de 60 personalidades del mundo político y social firmaron una carta de apoyo a Tohá. Este lunes se sumó el ex Presidente Lagos.
El sábado pasado, distintas personalidades políticas y sociales –como el sacerdote Felipe Berríos, el ex ministro PS, Álvaro Elizalde, o la ex ministra DC, Mariana Aylwin– firmaron una carta de apoyo a la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, quien está en medio del cuestionamiento por el financiamiento al PPD cuando era presidenta de la colectividad.
La misiva está suscrita por más de 60 personalidades, entre ellas, aparte de los antes mencionados, el ex ministro Osvaldo Puccio, además de Juan José Tohá, el sociólogo Manuel Antonio Garretón, los parlamentarios Felipe Harboe, Ricardo Lagos Weber y Yasna Provoste; asímismo, el presidente del Consejo Ciudadano de Observadores del Proceso Constituyente, Patricio Zapata, y el subsecretario del Trabajo, Francisco Díaz, entre otros.
Este lunes se sumaron dos nuevas firmas, una de ellas, la del ex Presidente y fundador del PPD, Ricardo Lagos, quien envió un mensaje pidiendo que agregaran su adherencia a la misiva en apoyo a la actual alcaldesa de Santiago, que ha sido cuestionada por los pagos de SQM recibidos por el PPD, durante el periodo en que ella era presidenta del partido.
El otro personero del mundo político que también pidió ser agregado a la carta de apoyo fue el senador Ignacio Walker (DC), según indicó La Tercera.
Cabe recordar que la misiva destaca el papel de la jefa comunal en su quehacer político, indicando que ella «representa una parte de lo más valioso de nuestra tradición cívica y republicana. Dirigente estudiantil, parlamentaria, ministra y hoy alcaldesa de la capital de Chile. Al mismo tiempo, ha sabido sintonizar con el protagonismo de los ciudadanos en la nueva democracia transparente y participativa que estamos construyendo».
Y añade que «por el rol de primera línea que ha jugado durante años, siempre con una conducta intachable, está expuesta a ser vinculada con malas prácticas que se impusieron en el ejercicio de la política hasta hace poco tiempo».
