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El ardiente verano que vive el PS para intentar zanjar su dilema presidencial Escalona no logra amarrar un resultado certero para el Comité Central de mañana

El ardiente verano que vive el PS para intentar zanjar su dilema presidencial

Marcela Jiménez
Por : Marcela Jiménez Periodista de El Mostrador
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En el Partido Socialista dijeron que el ex timonel movió equivocadamente el avispero y que ha presionado más de la cuenta, lo que, unido a su conocido estilo autoritario, ha generado el efecto inverso al deseado, sin lograr imponer hasta ahora la idea de que el órgano resolutivo vote el sábado entre las cuatro opciones en carrera. La mesa directiva del partido ayer –con el voto minoritario del ex senador– se inclinó por respetar la decisión original del último congreso del PS, que estableció que el candidato de la colectividad debe ser elegido en una primaria o consulta.


“Ni idea”. Esa es la respuesta que transversalmente dan en el Partido Socialista acerca de lo que resolverá finalmente el Comité Central de mañana sobre cómo, cuándo y a quién elegir para abanderado presidencial de la colectividad en pos de las primarias legales del 2 de julio. La temperatura política en el socialismo, supera con creces los 35 grados que hay en las calles. La incertidumbre es total, debido a los apoyos cruzados que coexisten en los distintos lotes de la colectividad hacia alguna de las cuatro opciones sobre la mesa: Ricardo Lagos, Alejandro Guillier, José Miguel Insulza y Fernando Atria. El problema mayor es que el tiempo se acabó. Y en el PS lo saben.

A mediados del 2016, en el cronograma socialista siempre estuvo contemplado que en noviembre el partido tuviera resuelto su candidato presidencial, que el pleno del día 26 era el minuto propicio. Pero con el correr de los meses el escenario se complicó para Lagos: la opción de Guillier tomó vuelo en las encuestas, sumó adeptos en las huestes socialistas y, lejos de dar un paso al costado, las opciones tanto de Insulza como de Atria se mantuvieron a firme en la carrera.

Ante la imposibilidad de llegar a una solución, es que se convocó a este Comité Central de mañana, con la expectativa de no seguir dilatando una definición que tiene al partido sumido en un clima de divisiones y fraccionamientos internos.

Hasta hace un mes, estaba bastante descartado que se generaran las condiciones para una proclamación de Lagos en la cita del sábado 21, algo que incluso en el entorno del ex Mandatario tenían bastante asumido. Sin embargo, en la propia colectividad reconocen que el vicepresidente, Camilo Escalona –uno de los principales impulsores de la candidatura del ex Presidente–, se ha negado a asumir su derrota en el Comité Central en este punto, por lo que hasta última hora ha realizado un intenso despliegue para tratar de inclinar la balanza y lograr imponer una nueva propuesta, presionando a que el órgano resolutivo vote inmediatamente por una de las cuatro opciones.

Esta propuesta se sustenta en que Escalona apuesta a tener los votos necesarios en el Comité Central para asegurar un triunfo de Lagos y, así, ungirlo como el abanderado del PS. Pero en dicho partido ponen en duda que eso sea realmente así, insisten en que la Nueva Izquierda –tras el quiebre con Osvaldo Andrade y la creación de la Convergencia Socialista, sumado esto al reciente veto que le propinó Escalona– ya no tiene la fuerza interna que ostentó por años en la colectividad. Además, como los apoyos presidenciales están cruzados, no es posible contar los votos en bloque como antes y esta fórmula hace caso omiso del deseo mayoritario en la colectividad, respecto a resolver el tema presidencial a través de una consulta ciudadana.

El Comité Central es representativo, sus 112 integrantes fueron elegidos por más de 35 mil militantes de base, pero no es lo mismo que hacer una primaria o una consulta. “La militancia PS quiere una decisión soberana y democrática y hacer lo que quiere Escalona puede provocar la división en el partido”, explicó un dirigente socialista.

El temor de una división interna se sustenta en el hecho de que, de ganar Lagos, se impondría por un estrecho margen, lo que tornaría difícil que los adherentes a los otros candidatos se plieguen sin reclamar o cuestionar la forma en que se resolvió el tema. Más aún, cuando a la actual directiva que encabeza la senadora Isabel Allende lo que más se le ha criticado internamente es su falta de conducción y liderazgo, amén de una excesiva ambigüedad, debilidades que han contribuido a que el PS se encuentre en el zapato chino en el que está hoy.

Si durante los últimos meses la directiva no fue capaz de ordenar las huestes socialistas, difícilmente puede –temen en la tienda– dar garantías de alinearlas tras un abanderado que ganó raspando en el Central y sin pasar por una  consulta ciudadana. A eso se suma la competencia abierta para la interna del 23 de marzo, que lejos de bajar la temperatura interna en el partido, lo tensionará todavía más los próximos dos meses.

Si bien Escalona no es el único laguista, sí es el que ha tenido un papel más protagónico en el intento por amarrar una definición mañana de parte del Comité Central. En el programa “El Primer Café”, de Radio Cooperativa, el ex senador dijo que “hacer una primaria entre los dos candidatos más débiles, con todo respeto de José Miguel Insulza y Fernando Atria, con los dos candidatos que no tienen ninguna posibilidad de ganar la primaria de la Nueva Mayoría, es en verdad un contrasentido para el PS (…) podría ser que por primera vez lleguemos últimos en la primaria de la Nueva Mayoría, entonces para que el partido no se arriesgue a un bochorno político, yo soy partidario que, con los cuatro nombres que existen hoy, votemos el sábado, incluyendo a Alejandro Guillier en la votación, porque no se puede excluir a nadie, y el que tiene un voto más se transforma en nuestro abanderado».

No se quedó ahí. Precisó que Insulza “llegó a este proceso en noviembre, él estuvo durante más de un año en la indefinición, no tiene autoridad moral para pedirle al PS que nosotros hagamos lo que él quiera”.

En el Partido Socialista dijeron que Escalona movió equivocadamente el avispero y que ha presionado más de la cuenta, lo que, unido a su conocido estilo autoritario, ha generado el efecto inverso al deseado, al punto de que laguistas reconocidos saltaran a la palestra a rechazar la idea de la votación en el Central. “Esto que hace, sus declaraciones, más parecen un abrazo del oso al ex Presidente Lagos que un apoyo real, porque va en el sentido contrario de lo que la ciudadanía y la militancia del PS quieren, que haya una definición soberana de las bases, y ese mecanismo tiene que instaurarse urgentemente. Forzar para el sábado sería dañino para el ex Presidente Lagos y para el PS”, sentenció ayer el diputado Fidel Espinoza, que públicamente apoya al ex Mandatario, pero no comulga con la fórmula que trata de imponer Escalona.

La mesa directiva se reunió ayer por más de dos horas para tratar de llegar con una propuesta concreta al Comité Central y, al concluir, Allende dijo que se inclinan por respetar la decisión original del último congreso del PS, que estableció que el candidato de la colectividad debe ser elegido en una primaria o consulta. Escalona fue el voto de minoría.

Pero en vista de que el escenario está abierto, por lo que cualquier cosa puede pasar, la dirigencia tomó precauciones y, por si el Comité Central decide no ratificar el acuerdo de primarias, mandó a hacer votos y preparar urnas para el sábado.

Tomar distancia

El miércoles, Lagos tomó una estratégica distancia del PS y sentenció que no participará de una eventual primaria o consulta que haga el PS: «Yo he sido proclamado candidato por el PPD y, en consecuencia, estamos en la primaria legal y creo que eso es suficiente».

En la colectividad vieron esas declaraciones como una forma de darle espacio a Escalona para negociar, aunque también tienen su explicación en que fue la mejor forma de Lagos para no aparecer públicamente esperando o dependiendo del esquivo apoyo de los socialistas.

No es que el ex Mandatario no necesite al PS, pero optó por la estrategia de distanciarse de las decisiones partidistas y comenzar de lleno su campaña, desplegarse en terreno, divulgar sus propuestas. “Se acabó el tiempo, ya esperamos todo lo que se podía, ahora hay que ponerse a trabajar y desplegarse”, explicó un estrecho colaborador del comando.

[cita tipo= «destaque»]Hasta hace un mes, estaba bastante descartado que se generaran las condiciones para una proclamación de Lagos en la cita del sábado 21, algo que incluso en el entorno del ex Mandatario tenían bastante asumido. Sin embargo, en la propia colectividad reconocen que el vicepresidente, Camilo Escalona –uno de los principales impulsores de la candidatura del ex Presidente–, se ha negado a asumir su derrota en el Comité Central en este punto, por lo que hasta última hora ha realizado un intenso despliegue para tratar de inclinar la balanza y lograr imponer una nueva propuesta, presionando a que el órgano resolutivo vote inmediatamente por una de las cuatro opciones.[/cita]

Algo de eso adelantó Máximo Pacheco, generalísimo de Lagos, en una entrevista a El Líbero tras la proclamación del PPD el sábado 14 de enero: “Hoy día queda firme que va a ser candidato a la primaria, mucha gente cuestionó y dudó que quizás no iba a ser; bueno, hoy día a todos aquellos que tuvieron esas dudas, hoy se despejan. La campaña entra en una nueva etapa, porque ya es un hecho cierto que él va a estar en la primaria y entonces él comienza a conversar con la gente y la ciudadanía en base a las propuestas que tiene para su próximo gobierno”.

El hecho de no contar a estas alturas con el respaldo del PS –y la posibilidad de que el partido se incline por otra alternativa– no deja de ser un fracaso para Lagos, tomando en cuenta que por dos décadas fue considerado como un capital político de la colectividad. Pero también es una derrota para Escalona, que ha operado a su favor, y asimismo para Pacheco, quien, siendo socialista militante, no logró abrochar el respaldo de su propio partido.

En el núcleo duro del laguismo no desconocen la derrota de Pacheco y Escalona, pero recalcan que esta se cristalizó y asumió en noviembre, cuando ese Comité Central optó por dilatar la definición presidencial. Entre los críticos que tiene el ex ministro en el PS, sostienen que su mayor error fue desconocer la cultura socialista, no entender a la colectividad y apostar a que bastaban algunas llamadas a un par de caciques, sin atender a que el partido cambio.

Desde el comando laguista defendieron a Pacheco y plantearon que su principal tarea política era asegurar que el nombre de Lagos estuviese en el voto del 2 de julio y eso ya lo logró, agregaron, con la proclamación que le hizo el PPD el sábado pasado.

En el laguismo reconocen que, si mañana se da un escenario de votación en el Comité Central, es claramente un triunfo para el ex Presidente y que, en el caso de que se mantenga la decisión de una primaria en abril, significaría una derrota política indiscutida.

Hay otra opción y es la cuarta urna, o sea, que el PS resuelva aprovechar la elección interna del 23 de marzo e instalar una urna extra para que ese mismo día se vote por el candidato del partido.

Primaria o consulta, es un escenario favorable para Guillier, quien –si bien ya fue proclamado por el Partido Radical hace quince días– aún no tiene asegurado su ticket para las primarias del 2 de julio, debido a las dudas que imperan en cuanto a que el PR logre cumplir con el umbral mínimo de militantes refichados (16 mil) que exige la ley a las colectividades. El PS es uno de los partidos que carece de problemas con ese ítem y tiene asegurado su refichaje y, si bien el PPD aún no tiene cifras azules, está en mejor pie que el radicalismo.

En su columna del jueves en La Segunda, el analista y académico Alfredo Joignant destacó ese punto. “Si un partido solo lograse inscribirse en 3 regiones contiguas o en 8 regiones geográficamente discontinuas, este solo podría presentar candidatos a diputados y senadores en dichas regiones, y no podría hacerlo en los mismos términos para la primaria presidencial del 2 de julio: para poder hacerlo, ese partido requeriría corroborar que en dichas regiones logró afiliar al 0,5% (y no al 0,25%) de los electores que votaron en la última elección a diputados. Si eso no se cumple, ese partido no podría proclamar, ni sostener en el tiempo la proclamación de un candidato a una primaria presidencial legal, dado que su existencia fue objeto de disolución. Aún más: el artículo 15 de la ley de primarias no permite que un partido distinto pueda proclamar a un candidato que milita en otro partido para competir en eventuales elecciones primarias presidenciales”.

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