Publicidad
OAS y la investigación de la campaña de Bachelet: la prueba de la blancura del fiscal Abbott Fiscal Nacional retornó de su viaje a Brasil, donde firmó convenios de colaboración con su par de ese país

OAS y la investigación de la campaña de Bachelet: la prueba de la blancura del fiscal Abbott

El caso OAS es la arista criolla de “Lava Jato”, la indagatoria por corrupción más grande en la historia de Brasil y en la cual en Chile ya se indaga a Marco Enríquez-Ominami por el uso de un jet privado para su pasada campaña presidencial. Sin embargo, ahora en las carpetas investigativas que lleva Ximena Chong podría aparecer un antecedente que –según la publicación de Veja– está relacionado con un aporte cercano a 150 mil dólares en efectivo para saldar deudas de campaña del comando de Michelle Bachelet. Abbott afirmó que se investigará incluso si sale el nombre de la Presidenta, aunque para abogados querellantes en casos de corrupción en Chile será un gran desafío indagar a quien lo eligió como Fiscal Nacional.


Jorge Abbott fue elegido por Michelle Bachelet para ser Fiscal Nacional y ahora se abre el escenario de que el Ministerio Público tenga que revisar antecedentes de la fiscalía brasileña que podrían vincular al comando de campaña la Mandataria con el caso OAS. Panorama que pone a la máxima autoridad del Ministerio Público en el centro de atención sobre cómo se irá desarrollando esta indagatoria que tiene como origen Brasil y con esquirlas en nuestro país. Al interior de la Fiscalía Nacional afirman que es un momento “importante respecto a las decisiones que se tomarán” con la información que ha ido surgiendo en la arista chilena del caso Lava Jato, el escándalo más grande de corrupción que ha tenido Brasil en su historia y entre cuyas consecuencias han existido acusaciones contra ex mandatarios y actuales presidentes en Sudamérica.

Hay una orden de detención contra el ex presidente peruano Alejandro Toledo, antecedentes que vinculan con el financiamiento irregular al círculo cercano de Ollanta Humala y del actual mandatario de Colombia, Juan Manuel Santos.

Chile no quedó al margen. Hace meses que la fiscal de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte, Ximena Chong, indaga al líder del Pro, Marco Enríquez-Ominami por el uso de un jet privado que habría sido otorgado por OAS. Pero, según la publicación de la revista brasileña Veja, en Chile también se financió la campaña de Bachelet. Se habla de una suma cercana a los 100 millones de pesos que, por gestión del ex presidente Lula Da Silva, habría sido traspasada desde OAS al comando de la actual Jefa de Estado chilena para saldar deudas de campaña.

Información que preocupa al círculo cercano de la Mandataria, pero también al Ministerio Público. “En nuestras investigaciones entiendo que no tenemos, no existen antecedentes del particular sobre ello, sin perjuicio de las investigaciones que podamos desarrollar precisamente a partir de las declaraciones que podemos hacer a estos personeros y que actualmente están en trámite, respecto de las cuales el fiscal general de Brasil se ha comprometido en términos de poder participar en las mismas. No se está investigando, pero sí puede aparecer en las declaraciones que puedan prestarse por parte de quienes son testigos e imputados y condenados en el caso Lava Jato”, afirmó el fiscal Abbott a Canal 13.

Por lo mismo y aunque algunas personas en la Fiscalía Nacional plantean que los acuerdos con la fiscalía brasileña –que permitirá a fiscales chilenos y funcionarios de la PDI tener acceso de forma más rápida a las diligencias que se hagan en Brasil e incluso participar de ellas– son amplios, el hecho de que OAS llegue a Bachelet complica públicamente al Ministerio Público.

“Se va a cuestionar que don Jorge haya sido elegido por la Presidenta. Creo que él tendrá que decidir en el caso de que sean ciertas y cien por ciento confiables para la investigación las informaciones de un eventual nexo OAS-Bachelet. O ir hasta el fondo respecto a los responsables o asumir ese costo de ser pasivo respecto a los alcances que pueda tener indagar a la Presidenta, estando ella en el cargo”, plantea un funcionario de la Fiscalía Nacional.

Fiscalía, OAS, Bachelet

Abbott, reconocido hombre cauto, institucional y que consulta varias opiniones a su círculo cercano sobre determinaciones que toma, dejó en claro en esta visita a Brasil de la semana pasada que, de salir el nombre de Michelle Bachelet, de todas formas se va a investigar. “Absolutamente si hay algo que los ministerios públicos tenemos claro es nuestra total autonomía de los otros poderes del Estado y nuestra absoluta obligación de investigar a todas las personas”, aseguró el persecutor.

Algo que para algunos críticos, al interior incluso de la propia Fiscalía, sorprendió. “Hubo un cambio respecto a la posición que ha tenido en los casos públicos del último tiempo en cuanto a su forma de referirse a ellos. Optó por no eludir eventuales escenarios”, afirma un alto cargo del Ministerio Público.

[cita tipo=»destaque»]El penalista Matías Ramírez agrega que se pondrá a prueba Abbott sobre todo por los avances que ha tenido en Brasil este caso. “El Ministerio Público de Brasil ha demostrado una férrea autonomía y voluntad de investigar sin contemplaciones, caiga quien caiga, distintos hechos de corrupción, que es precisamente lo que no se observa con claridad en el caso de la Fiscalía chilena. El viaje de Abbott y los compromisos de colaboración que se ha logrado con la fiscalía brasileña pueden ser positivos en la medida que impulse a nuestro Fiscal Nacional para definir una posición, en materia de corrupción, que sea más clara y decidida”.[/cita]

Para algunos en el organismo persecutor es “una jugada importante que deberá respetar si se confirma aquel panorama”. Fuentes que conocen de cerca a Jorge Abbott sostienen que será difícil que llegue a indagar a Bachelet, “no porque no quiera, sino que tendrá que haber mucho más que simples indicios para investigar a fondo. Además, acá Bachelet es el personaje, pero los responsables parecieran ser concretamente terceros”.

Dentro de los antecedentes que se dieron a conocer por la revista brasileña Veja sobre el caso Lava Jato y su impacto en Chile, a través de la empresa OAS, están los testimonios que habrían dado los publicistas del Partido de los Trabajadores de Brasil, José Cavalcanti “Duda” Mendoza y Joao Santana. Ambos habrían contado en su propuesta de delación compensada cómo las mayores empresas del país interferían clandestinamente en las elecciones de naciones como Chile y Colombia, entre ellas, la de Michelle Bachelet.

Para los abogados querellantes en casos de corrupción en territorio chileno, el escenario de eventuales nexos de OAS con Bachelet pone a prueba al Fiscal Nacional, sobre todo por este compromiso internacional de las fiscalías del continente contra la corrupción.

“Abbott está en una disyuntiva ante esta colaboración internacional. Particularmente en las investigaciones que tienen que ver con distintos personeros vinculados a la campaña de Michelle Bachelet, como Giorgio Martelli o el ex ministro Rodrigo Peñailillo, donde los antecedentes son claros para recibir dineros de SQM, y no se ha tomado ninguna decisión del órgano persecutor. Esta instancia internacional pondrá entre la espada y la pared al Ministerio Público para tomar decisiones en estos casos de corrupción. Ahora bien, si esta investigación brasileña ha llevado un curso, es importante que los antecedentes sean conocidos por el Ministerio Público y se tomen las decisiones propias por parte de las autoridades chilenas sobre las personas involucradas y no solo circunscribirlo a delitos tributarios sino derechamente entrar de lleno a las contraprestaciones que ha habido tras estos pagos”, señala el querellante de los casos SQM y Corpesca, Matías Ramírez.

En esa misma línea, Mauricio Daza, también querellante en casos de financiamiento irregular, plantea que “al igual que SQM, donde se investiga una red de corrupción que afecta a todos los sectores de nuestro espectro político, OAS es una prueba de fuego para la credibilidad e independencia real de la Fiscalía, ya que se trata de un caso que implica investigar no solo lo que ocurrió con Marco Enríquez-Ominami sino también por financiamiento ilegal de la campaña presidencial de la Nueva Mayoría, la cual llevó a la presidencia a Michelle Bachelet”.

El penalista, eso sí, agrega que se pondrá a prueba a Abbott sobre todo por los avances que ha tenido en Brasil este caso. “El Ministerio Público de Brasil ha demostrado una férrea autonomía y voluntad de investigar sin contemplaciones, caiga quien caiga, distintos hechos de corrupción, que es precisamente lo que no se observa con claridad en el caso de la Fiscalía chilena. El viaje de Abbott y los compromisos de colaboración que se ha logrado con la fiscalía brasileña pueden ser positivos en la medida que impulse a nuestro Fiscal Nacional para definir una posición, en materia de corrupción, que sea más clara y decidida en cuanto a avanzar hasta el fondo en este tipo de indagaciones, sin considerar la posición del poder político o económico de quienes están imputados”, apunta.

El factor Chong

En el viaje de Jorge Abbott a Brasil también participó Ximena Chong Campusano, la fiscal que tiene en sus manos el caso OAS y que es reconocida por ser severa y meticulosa en causas de corrupción. Delitos de este tipo son su especialidad y por eso, para algunos funcionarios en la sede de la Fiscalía Nacional, Chong es una garantía de buena investigación. “Es una de las mejores fiscales del país. Es rigurosa y, si hay antecedentes fundados, va a investigar. Ella no cuida instituciones, ella indaga, persigue delitos”, aseguran.

El caso OAS tiene por ahora a Enríquez-Ominami como principal protagonista, pero la fiscal Chong podrá contar en las próximas semanas con antecedentes de las carpetas investigativas de Brasil relacionadas con la indagatoria que se lleva a cabo allá.

Abogados querellantes que han participado de procesos investigativos con ella como fiscal, coinciden en lo rigurosa y detallista que es la persecutora de la fiscalía Centro Norte, pero precisan que, al ser un caso donde se plantean eventuales nexos con la campaña presidencial de la actual Mandataria, la opción de llegar hasta las últimas consecuencias podría ser más difícil.

“Si bien es una fiscal de excelencia, profesional y comprometida con su función pública, su presencia no es garantía sobre cuál va a ser el destino final de las causas donde interviene, ya que finalmente quienes deciden sobre esta materia son los fiscales regionales, que tienen asignadas la direcciones de tales investigaciones y, en última instancia, el Fiscal Nacional Jorge Abbott”, puntualiza Mauricio Daza.

Desde el Ministerio Público aseguran que hay una buena relación entre Abbott y Chong, que él la respeta mucho por su trabajo, pero que el avance de la indagatoria reflejará finalmente cuál es el real alcance que Abbott y, por ende, Ximena Chong, tendrán en la arista OAS en Chile.

Publicidad

Tendencias