La votación de la sala finalmente aprobó que la iniciativa sea acogida a tramitación
Mario Fernández admitió que «una iniciativa que aunque sea gravosa, según algunos conocedores de la economía porque aumentaría el costo del empleador, de todas maneras habría que pensar que los países más importantes del mundo, los más desarrollados del mundo, tienen este tipo de jornadas laborales». El proyecto fue declarado admisible después de ser «dado por muerto» por tener un componente inconstitucional.
A mediados de marzo la diputada Camila Vallejo nuevamente se ganaba la atención de la opinión pública, pero esta vez no por un chiste sobre su apariencia física, su militancia en el PC, la niñera de su hija o las llaves de un supuesto Audi del año.
Parafraseando una canción del Puma Rodriguez, «tengo derecho a ser feliz» la diputada explicó en redes sociales, su proyecto para rebajar la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales. Vallejo defendió la propuesta, entre otros argumentos, con el hecho de que en países desarrollados se trabaja menos que en Chile y existe un mayor nivel de productividad. «Creemos que es viable, no es una propuesta loca. Muchos países lo han hecho y no afecta la economía”, dijo.
Según los datos disponibles, Chile es el tercer país de la OCDE donde más se trabaja. Pero sólo está en el lugar numero 13 en el ranking de productividad, a partir de las estadísticas de 2013.
Pero a pesar de su evidente buena acogida entre los votantes, la nueva mesa que preside la Cámara de Diputados, encabezada por el socialista Fidel Espinoza, sepultó la iniciativa asegurando que era inadmisible. Precisando que es inconstitucional que el Congreso, a través de una ley, regule los sueldos del sector privado, que sería una de las implicancias de la eventual ley.
Sin embargo, las cosas se dieron vuelta a favor de la iniciativa, tal vez porque la popularidad de la iniciativa es inobgetable en medio de la baja adhesión a los parlamentarios. De cualquier manera, hoy se tramitó la admisibilidad de discutir el proyecto, con su respectiva votación en la Cámara de Diputados. Los parlamentarios debían votar a favor o en contra de la posición de la mesa directiva, que lo había declarado inadmisible.
Y por 41 votos en contra de la inadmisibilidad y 21 a favor, en su mayoría de la oposición, el proyecto para rebajar la jornada laboral será discutido.
La diputada Vallejo manifestó que «nosotros teníamos la convicción de que esto era admisible y por lo tanto lo defendimos como tal, aquí hay muchas iniciativas parlamentarias que se han aprobado y que hoy día son ley, por ejemplo, feriados nacionales y regionales que hacen que sea un día entero sin trabajar y sin afectar la remuneración, por lo tanto el argumento que da la mesa de decir que por reducir la jornada y sin afectar los salarios afecta a la base de calculo de las remuneraciones, no procede».
Desde el gobierno hubo pronunciamientos disímiles una vez conocida la noticia. La vocera de gobierno, Paula Narvaé, manifestó que como Ejecutivo no patrocinarán este proyecto de»40 horas». «Hemos planteado nuestra agenda legislativa para el 2017 y no está dentro de nuestras prioridades este tema. Respetamos absolutamente las facultades de los parlamentarios de llevar adelante sus mociones, pero el ejecutivo en esta iniciativa no ha planteado su patrocino».
Asimismo el Ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, dijo que en su estado actual no lo apoyaba. «Es bien importante reconocer que nosotros trabajamos muchas horas en Chile, pero lo que hay que hacer es ser más productivo para trabajar menos horas, y no hay evidencia al revés. Este proyecto específico yo no lo apoyo si es que no involucra un cambio paralelo de los salarios, porque lo que no podemos hacer es ponerle más carga a la economía en un momento en que requerimos más empleo», dijo Valdés esta mañana, el mismo día en que las cifras revelaron la peor caída del Imacec en ocho años.
Sin embargo, en contraste con el rechazo de algunos miembros del gabinete de la Presidenta Bachelet, el ministro del Interior, Mario Fernández se mostró a favor. «Una persona si llega a las 5 de la tarde en vez de las 8 o las 9 de la noche a su casa, ciertamente que al día siguiente, al irse de nuevo al trabajo, va a ser mucho más productivo», dijo.
El ministro hizo un guiño a la opinión de su colega de Hacienda. «Una iniciativa que aunque sea gravosa, según algunos conocedores de la economía, porque aumentaría el costo del empleador, de todas maneras habría que pensar que los países más importantes del mundo, los más desarrollados del mundo, tienen este tipo de jornadas laborales».
Antes de llevarla al Congreso, Vallejo había asegurado que la idea plasmada en el proyecto, había sido discutida con Fernández y Valdés. Por eso ahora, cada uno expresó claramente su opinión.
