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La modernización capitalista entre dos Papas Opinión

La modernización capitalista entre dos Papas

Jaime Retamal
Por : Jaime Retamal Facultad de Humanidades de la Usach
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Lo que se gobierna en Chile no es otra cosa que una facticidad llamada modernización capitalista. Eso que conoció en ciernes Juan Pablo II, visto en todos los televisores de la época, y que hoy verá Francisco, reproducido en digital, en todos y cada uno de los ultra HD curvos que con orgullo cada chileno y chilena tiene en su habitación, por muy humilde que esta sea, llámese gueto vertical hoy en la época de Bergoglio, población callampa ayer, en la de Wojtyla.


La creatura fue bautizada y nombrada oficialmente por la dictadura de Pinochet como “modernización capitalista” cuando recién despuntaba la década de los ochenta.

Juan Pablo II arribó al país en plena “revolución silenciosa”, como le llamó Joaquín Lavín en ese memorable primer libro que quiso interpretar lo social-político-cultural desde la facticidad del dinero-mercado-consumo.

Francisco lo hace en cambio después de años de gobiernos que han sabido administrar el régimen de esa sacrosanta facticidad llamada “mercado”.

No ha sido fácil, pero la democracia lo ha logrado; ha resultado airosa en su gobierno de lo fáctico. La democracia de derecha peor eso sí que la democracia de izquierda.

Vamos a ver cómo lo hará Piñera 2, aunque nadie puede negar que la Concertación fue maestra en lo que se llamó conspicuamente “circuito extrainstitucional del poder”, pero que oficialmente llamaron “gobernabilidad”. Así como el texto inaugural de Lavín en los ochenta, los libros de Eugenio Tironi en los noventa son una verdadera joya para entender la sociología que les inspiró: es la misma idea de Joaquín Lavín, pero con aires parisinos. Por cierto, ni que recordarlo, hoy los niños que no conocieron esto se entretienen con lo que el dinero sí puede comprar. La misma línea de Lavín-Tironi, pero con un toque más de arribismo filosófico, claro, entretenidísimo.

[cita tipo=»destaque»]Ayer Juan Pablo II y hoy Francisco bendecirán a la cuna madre de esta modernización, la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC). Ojo que a la entrada de la Facultad de Economía de la PUC, por si no lo sabían, como signo, hay una hermosa estatua de San Francisco de Asís, el santo de los pobres… ¿Ironía? Para nada. La modernización capitalista fue y es una cruzada, también fáctica, por el control moral y social de la cultura chilena. Poscontrol, queridos lectores… posdisciplinamiento.[/cita]

Lo que se gobierna en Chile no es otra cosa que una facticidad llamada modernización capitalista. Eso que conoció en ciernes Juan Pablo II, visto en todos los televisores de la época, y que hoy verá Francisco, reproducido en digital, en todos y cada uno de los ultra HD curvos que con orgullo cada chileno y chilena tiene en su habitación, por muy humilde que ésta sea, llámese gueto vertical hoy en la época de Bergoglio, población callampa ayer, en la de Wojtyla.

Releo un lúcido texto de Alfredo Jocelyn-Holt de febrero del año 2000: “Si Lagos escucha y recoge lo que, incluso desde dentro de sus propias filas, se ha venido a llamar el malestar –cierto ánimo desencantado, autocrítico, respecto de la Concertación y su incapacidad de hacer efectivas promesas que le han brindado acogida desde 1988–, si Lagos resuelve eso al menos, entonces es posible que su gobierno pase a mayores”.

Desde el año 2000 que venimos en la misma… Ni Lagos lo resolvió, ni mucho menos toda esa coalición. En esa ocasión habían ganado la presidencia raspando la olla común del PC en contra del mismísimo Joaquín Lavín, y después con los años vino lo que vino: gobernar la facticidad de la modernización capitalista, pero ahora con rostro de mujer… si hasta parece un tango.

Ayer Juan Pablo II y hoy Francisco bendecirán a la cuna madre de esta modernización, la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC). Ojo que a la entrada de la Facultad de Economía de la PUC, por si no lo sabían, como signo, hay una hermosa estatua de San Francisco de Asís, el santo de los pobres… ¿Ironía? Para nada. La modernización capitalista fue y es una cruzada, también fáctica, por el control moral y social de la cultura chilena. Poscontrol, queridos lectores… posdisciplinamiento.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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