Natalia Compagnon, dueña de la empresa Caval, logró convencer a Concha de desembolsar $1.200 millones por diversos servicios, más otros $500 millones en efectivo, fue la alerta que le entregó sobre un presunto fraude luego de realizar un análisis tecnológico, y en la cual estuvo involucrado Dávalos. Así lo determinó la investigación de la Fiscalía Regional de Rancagua, de acuerdo a una serie de correos electrónicos que revelan que el hijo de Bachelet respecto a los vínculos de Caval con Vial Concha.
Miércoles 28 de marzo, ese es el día en el que Sebastián Dávalos, hijo de la ex Presidenta Michelle Bachelet, será formalizado por el delito de estafa contra el empresario Gonzalo Vial Concha.
La fiscalía, en esta oportunidad, se centrará en analizar los dineros que no cuadrarían en las cuentas bancarias de Concha, quien fue perjudicado por Dávalos y su esposa, Natalia Compagnon, quienes en conjunto con otros ejecutivos de la empresa Caval, convencieron al inversionista de que era objeto de un complot para perjudicarlo financieramente.
De acuerdo a La Tercera PM, Natalia Compagnon, dueña de la empresa Caval, logró convencer a Concha de desembolsar $1.200 millones por diversos servicios, más otros $500 millones en efectivo, fue la alerta que le entregó sobre un presunto fraude luego de realizar un análisis tecnológico, y en la cual estuvo involucrado Dávalos. Así lo determinó la investigación de la Fiscalía Regional de Rancagua, de acuerdo a una serie de correos electrónicos que revelan que el hijo de Bachelet respecto a los vínculos de Caval con Vial Concha.
«Compagnon mandó a unas personas que revisaron los equipos computacionales y detectaron que eran vulnerables, esto ocurrió a principios de 2012. Ella basó este complot en la información que ella habría conseguido de expertos en computación que habían detectado que empleados de la empresa estarían defraudándola, se me habló de millones de dólares». Esa fue la última declaración de Vial sobre el Caso Caval, el pasado 28 de diciembre.
Los testimonios contradictorios de Sebastián Dávalos
En una declaración ante la fiscalía en 2015, Sebastián Dávalos aseveró que durante 2012 se dedicó a colaborar en una Fundación de Hipoterapia y un Museo de Caballos que le ofrecieron a Gonzalo Vial. «Durante el primer semestre de 2012 trabajé para la Direcon y también para Caval, concretamente en la creación de una Fundación de Hipoterapia y un museo para Gonzalo Vial Concha.
Al ser consultado por informes mineros para el empresario, el 16 de enero de este año, Dávalos señaló: «Yo no trabajé en ningún proyecto minero, no realicé ninguna actividad para Caval en cuanto al área minera».
De acuerdo a las pruebas a las cuales tuvo acceso La Tercera PM, las declaraciones de Dávalos no se ajustarían a la realidad.
Los correos electrónicos dan cuenta de una serie de servicios por parte de Caval hacia Vial Concha. Uno de ellos, enviado por Dávalos a la directora de proyectos de la compañía de su esposa, Sol Herreros, señala una serie de “riesgos para la continuidad operativa de la infraestructura” de la compañía. Y señala «expresado el nivel de exposición frente a terceros expertos en informática (hackers) mal intencionados, podríamos decir que la empresa se encuentra altamente expuesta y completamente vulnerable».
En este caso, se trata de una auditoría de seguridad de empresa Advantech, en la que Vial autorizó el ingreso a sus oficinas para que Humberto López se reuniera con el equipo de sistemas para levantar un informe.
La formalización en contra de Sebastián Dávalos el próximo 28 de marzo estará centrada en los negocios con Vial Concha, así como los dineros que no cuadrarían en sus cuentas bancarias.
