Ayer, el Arzobispo de Santiago dijo sobre el tema: «hay que ir a la realidad de las cosas. No porque yo a un gato le pongo nombre de perro, comienza a ser perro». Tras la frase, diversos movimientos lo criticaron, por lo que, a través de un comunicado, tuvo que salir a dar su versión oficial.
«Hay que ir a la realidad de las cosas. No porque yo a un gato le pongo nombre de perro, comienza a ser perro» fue la frase que desató la polémica sobre el Arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati. Sus dichos, en marco del proyecto de Identidad de Género, causaron molestias en las agrupaciones que promueven la ley, como el Movilh y la Fundación Iguales.
A través de un escueto comunicado, el Arzobispado, en nombre de Ezzati, indica que “lamenta que el uso de una alegoría para referirse al concepto de nominalismo haya sido interpretada como una ofensa a quienes merecen todo su respeto y aprecio”.
“En el curso del diálogo con la periodista, el arzobispo invitó a ir al fondo del tema y a no quedarse en el simple “cambio registral”, con respeto y desde una antropología integral”, agrega el comunicado divulgado por la Iglesia.
