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Ignacio Sánchez indicó que el gobierno de Sebastián Piñera no tiene una «convicción detrás» de su nuevo reglamento que fue entregado el pasado jueves a Contraloría. Para el rector, el documento no está enfocado en el bienestar de las personas, sino que está escrito para «evitarse problemas con la Contraloría».
El pasado jueves, el Ministerio de Salud entregó a Contraloría el nuevo reglamento de objeción de conciencia en la Ley de Aborto en tres causales, tras haber sido rechazado en primera instancia por la misma Contraloría.
Esa señal es clara para el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, quien, en conversación con el diario La Tercera, afirmó que «no hay una convicción detrás» por parte del Gobierno. «El Gobierno no está haciendo un reglamento que se ajuste al bienestar de las personas, y me parece grave que no tenga esa mirada de bien común, sino solo la de evitarse problemas con la Contraloría», argumentó.
Sánchez también se refirió al documento que deja en claro que las instituciones de salud que la apliquen no recibirán fondos estatales: «Nos parece que la objeción institucional está puesta en la ley diciendo que la institución podrá, de acuerdo a su ideario propio, ser objetora de conciencia, con todo un mecanismo al respecto. Los fondos públicos no pueden estar al arbitrio de las iniciativas estatales».
«En el proyecto de ley no aparecen restricciones y nos parece que no es el espíritu de la ley que un reglamento comience a ponerle restricciones a un derecho. Es inconstitucional negar un derecho fundamental a través de un reglamento. El derecho fundamental que la ley promueve es la objeción por instituciones, y este reglamento está acotando y negando ese derecho, poniéndole condiciones», sentenció.
