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La Asamblea Plenaria Extraordinaria estará marcada por la investigación del fiscal Emiliano Arias, quien adelantó que “vamos a investigar todo”. En el centro está la figura del cuestionado arzobispo de Santiago Ricardo Ezzati, aunque durante esta jornada el secretario general de la Conferencia Episcopal, Fernando Ramos, ya le adelantó su respaldo al asegurar que tiene la “convicción” de que no ha encubierto casos de abuso sexual. Por otro lado, Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos de Chile pedirá a La Moneda la creación de una especie de Comisión Valech para el tema de los delitos sexuales del clero.
Hasta este viernes, los obispos se ven las caras nuevamente en Punta de Tralca, en una Asamblea Plenaria Extraordinaria que promete ser histórica, considerando el contexto marcado por denuncias de abuso y la citación de la Fiscalía al arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, como imputado por el delito de encubrimiento.
Esta reunión contará además (el miércoles) con la presencia de algunas víctimas de abuso sexual por parte del clero, según desclasificó Juan Carlos Cruz, uno de los más férreos denunciantes del sacerdote Fernando Karadima. Según comentó en Twitter, la invitación habría sido extendida a personas que no quieran salir en los medios.
«Obispos en reunión en Punta de Tralca invitan a algunas víctimas de abuso este miércoles. Especifican –según me cuentan– que sean personas que no quieran salir en los medios. Ojalá estos valientes hombres y mujeres puedan decirles lo que estos obispos no pueden/quieren entender», señaló Cruz.
La figura del arzobispo de Santiago Ricardo Ezzati y la investigación que lleva en marcha el Ministerio Público son cruciales en esta asamblea. Sin embargo, durante esta jornada, el secretario general de la Conferencia Episcopal, Fernando Ramos, aseguró tener la “convicción” de que el cardenal no ha encubierto casos de abuso sexual, en una clara señal de respaldo.
“Que esté en calidad de imputado quiere decir que está siendo investigado por un eventual encubrimiento. No conocemos cuáles son los antecedentes de que dispone la Fiscalía, pero me parece que el cardenal también va a colaborar en esa investigación”, dijo.
También esta jornada, el fiscal Arias insistió en imprimirle celeridad y profundidad a la causa, planteando que “acá estamos recién empezando una investigación que es bastante compleja de por sí (…) vamos a investigar todo” . Respecto a los próximos pasos, el persecutor indicó que “hay muchas diligencias que van a ser evaluadas por nuestro equipo y ahora, precisamente, nos abocamos a más casos incluso. No he descartado ninguna de esas diligencias, pero las que voy a hacer no me gusta anunciarlas por la prensa”, afirmó.
Igualmente, ratificó sus dichos sobre la destrucción de antecedentes, planteando que “ahora falta determinar quién destruyó específicamente y en concreto tal antecedente y cuál es en definitiva la participación de esta persona”. Asimismo, señaló que “si hubiese existido una debida promoción de denuncia ante la justicia civil, podríamos haber evitado quizás la comisión de otros delitos”.
La Asamblea Plenaria es extraordinaria, dado que lo habitual es que los obispos se reúnan de lunes a viernes en abril (este año en esa fecha el Papa envió a los prelados una carta tras el informe del arzobispo de Malta, Charles Scicluna) y en noviembre.
Los obispos estarán reunidos a puertas cerradas, sin invitados. «Se nos va a hacer corto el tiempo», precisó uno de los asistentes, de acuerdo a lo que consigna El Mercurio.
Respecto a los temas claves que se discutirán, el presidente de la Conferencia Episcopal, Santiago Silva, dijo a través de un comunicado que «somos del todo conscientes que el señor de la historia, Jesucristo, sabrá hacer renovaciones fundamentales con corazones bien dispuestos. Estos caminos que buscamos con empeño, caminos de verdad y justicia, reparación y acompañamiento, nos ayudarán a ser una Iglesia cada vez más parecida a la que sueña Jesucristo».
Por su parte, el secretario general del organismo y administrador apostólico de Rancagua, Fernando Ramos, detalló que el origen de este encuentro extraordinario se enmarca en el difícil momento que vive el clero: «Tras nuestro encuentro con el Papa y después de conocer su carta a la Iglesia de Chile, hemos venido trazando un camino de discernimiento para asumir los desafíos que él nos plantea y los que nosotros mismos queremos trabajar», dijo.
Asimismo, sostuvo que las reflexiones y propuestas que se han compartido desde las diferentes diócesis durante estos últimos cuatro meses llegarán «como principal aporte a esta asamblea».
En ese sentido, el teólogo y doctor en filosofía Álvaro Ramis aseguró que esta reunión entre obispos y diferentes actores vinculados a la institución eclesial, llegará para enfrentar una serie de complicaciones, como «la imagen pública» de la Iglesia. «La imputación del arzobispo Ezzati y, en general, el cuadro posterior a la visita a Roma (en mayo), ameritan en la Conferencia Episcopal un posicionamiento», sostuvo.
De este modo, en opinión de Ramis, en Punta de Tralca se podría incluso «llegar a generar un rediseño de la directiva, la presidencia y las comisiones de la Conferencia Episcopal, debido a que ha habido cambios sustantivos».
Además de esa adaptación «orgánica e impostergable» que tiene que darse, según el teólogo, también debe surgir desde la asamblea «algún documento que pueda reflexionar de manera sincera y profunda respecto a los que ha ocurrido».
«Lo que aquí se necesita es profundizar el por qué ha ocurrido lo que ha ocurrido y cómo la Iglesia va a tener un nuevo comportamiento desde la nueva convicción», agregó.
En tanto, el canonista y vocero de la fundación Voces Católicas, Alejandro Álvarez, apuntó que el principal tema que debiese abordarse en Punta de Tralca es «el protocolo del abuso». «Ese protocolo hoy día no tiene ninguna indicación que haga obligatorio el deber de informar a las autoridades judiciales chilenas de los casos en los que estén involucrados menores de edad», recalcó.
La mirada no solo estará puesta en Punta de Tralca, porque la Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos de Chile ha ido más allá y el miércoles entregarán una carta al Presidente Sebastián Piñera y al ministro del Interior, Andrés Chadwick, para solicitarles la creación de una comisión de la verdad, algo así como la Comisión de Prisión Política y Tortura, conocida como Comisión Valech, y cuyo objetivo sería abordar los casos de abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia.
“Queremos que se cree una comisión de justicia y verdad a nivel nacional”, dijo a La Tercera PM Fran Noa, primera mujer trans en denunciar un caso eclesiástico.
También pedirán una reunión con la presidenta de la Cámara, Maya Fernández, y el presidente del Senado, Carlos Montes. “Nos vamos a juntar con los jefes de bancadas para presentarles nuestra inquietud sobre qué se puede hacer en reparación, justicia y verdad hacia los sobrevivientes de abuso sexual eclesiástico acá en Chile”, acotó Noa.
