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La parlamentaria respondió este martes a través de una declaración pública, en la que recalcó que «la desvinculación laboral de la secretaria de mi equipo parlamentario, fue notificada y acordada de mutuo acuerdo por las partes, el pasado 23 de agosto de 2018».
La diputada Marisela Santibáñez se encuentra en el ojo del huracán luego que el viernes pasado la Asociación de Funcionarios de Parlamentarios (Afunpar) denunciara que la parlamentaria habría acosado laboralmente a su ex secretaria.
Santibáñez respondió este martes a través de una declaración pública, en la que recalcó que «la desvinculación laboral de la secretaria de mi equipo parlamentario, fue notificada y acordada de mutuo acuerdo por las partes, el pasado 23 de agosto de 2018».
«Le mantuvimos el contrato por todo septiembre y así garantizamos el cobro íntegro del sueldo del mes, además, le permitimos trabajar media jornada con el fin de que pudiese conseguir un nuevo espacio laboral dentro o fuera del Congreso. Lo que se cumplió íntegramente por el equipo parlamentario», señala el comunicado.
La legisladora explicó además que el 4 de septiembre se firmó el término de contrato, el cual culminó el 30 de septiembre, sin embargo, el día 13 la funcionaria se despidió de todo el equipo, asegurando que no los volvería a ver después de Fiestas Patrias, lo que explicaría la cancelación de sus cupos de almuerzo.
«Previa consulta a la administración para seguir conducto regular, se procedió a solicitar mediante correo electrónico, que de los dos cupos de almuerzo asignados para todo mi equipo, se cancelara la opción de uso comedor de la funcionaria, dado que dejaba de ser miembro activo. Solicitud que se rectificó inmediatamente, en cuanto se conversó con la Asociación de Funcionarios», dijo.
La comunicación sostiene que el lunes la secretaria ingresó su finiquito ante notario e invocó a la causal «Mutuo acuerdo de las partes», lo que dejó de manifiesto «la aceptación al termino del vínculo por la causal invocada y que además, de nuestra parte, se respetaron todos los acuerdos conversados».
«Todos los funcionarios con los que convivo a diario en el Congreso son testigos de que siempre me he relacionado con ellos sobre la base del respeto y cariño (…) Estoy firme y convencida de que siempre actué con buena fe. Y si en mi ritmo de trabajo llegue a incomodar a alguien, pido las disculpas del caso», finalizó la diputada.
