Las preocupaciones del Presidente de la Corte Suprema, Urbano Marín, no han sido sólo respecto a lo que considera el excesivo número de abogados en la plaza, y la subsecuente mala calidad de algunos de estos profesionales. En una entrevista concedida a la revista del Servicio Médico Legal
Las preocupaciones del Presidente de la Corte Suprema, Urbano Marín, no han sido sólo respecto a lo que considera el excesivo número de abogados en la plaza, y la subsecuente mala calidad de algunos de estos profesionales. En una entrevista concedida a la revista del Servicio Médico Legal, el magistrado también aprovechó para analizar ciertos problemas de la judicatura a partir del balance de estos ocho años de vigencia de la reforma procesal penal: «Nosotros estamos mal valorados, cada vez que los medios de comunicación creen que la Justicia ha fallado, no siempre son los Tribunales. A lo mejor la investigación no fue completa, o la formalización no fue bien planteada, o la Defensoría tenía razón. Por eso se producen decisiones que, si bien normalmente se enmiendan en instancias superiores de los Tribunales, aparecen imputables a nuestros jueces en circunstancias que éstos son árbitros neutrales de un conflicto que es entre dos partes, quienes tienen que producir los antecedentes para llegar a la decisión. Esa es la principal debilidad, desde nuestro punto de vista».
